El 31% de las empresas de Paysandú (contando micro, pequeñas, medianas y grandes) cerraron ante la emergencia sanitaria del COVID-19. Del total de empresas cerradas el 56% pasó su personal a seguro de paro o le otorgó licencia, no especificándose qué ha ocurrido con el 44% restante, aun cuando se pueden considerar como causas probables informalidad, imposibilidad de acceder al seguro de paro o despido.
La encuesta fue realizada por la economista Natalia Brutten contratada en el marco del proyecto “El Paysandú que Queremos” financiado por OPP-IDP y se implementó en forma activa junto al Centro Comercial e Industrial de Paysandú. También se contó con el apoyo del Centro de Competitividad Empresarial (ANDE) y la Agencia de Desarrollo de Paysandú.
Tomando como marco de comparación marzo de 2019, el 83% de las empresas abiertas sufrió una caída en sus ventas y el 11% indicó haber tenido un aumento. El principal motivo señalado para ambas variaciones es la situación de emergencia sanitaria. Entre las primeras, las pérdidas semanales medias tiene enorme impacto en las medianas, con 800.000 pesos, seguidas muy lejos por las pequeñas empresas con 67.544 pesos por semana y las microempresas con 37.750 pesos.
El estudio determinó que el sector más afectado por el cierre temporal de empresas es el de Indumentaria con un 89%, seguido por los hoteles con un 83%, Servicios de Estética el 80%, la Construcción (antes del retorno a la actividad) el 75%, Ópticas y Joyerías un 50%, y un 43% las Agencias de Viajes e Industrias Creativas.
PARTICIPARON 270 EMPRESAS
De la encuesta participaron 270 empresas. El 56% corresponde a microempresas, el 27% a pequeñas, el 10% a medianas y el 1% a grandes compañías. El 6% restante no indicó tamaño. Para clasificar el tamaño de una empresa se determinó como microempresas hasta 4 empleados, pequeñas entre 5 y 19 empleados, medianas entre 20 y 99 empleados y más de esas cantidad las grandes empresas.
En cuanto a las empresas que cerraron sus puertas, el porcentaje puede ser mayor al 31% pero la modalidad de la encuesta determinó que aquellas que cerraron al público pero se mantuvieron trabajando en el interior, se consideran como abiertas.
Entre las empresas que mantuvieron la actividad, el 56% redujo su horario laboral, en tanto el restante 45% redujo su personal. El mayor porcentaje de reducción se dio en las pequeñas y grandes empresas, en tanto el 70% de las microempresas abiertas no redujo su personal. En este tamaño de empresas la fuerza laboral generalmente está a cargo de los propietarios. Por otra parte, el 99% de las empresas cerradas manifestaron su interés de reabrir una vez pasada la crisis,
En lo que refiere a los costos empresariales, el 75% de las empresas indicaron haber reducido la compra de insumos, un 32% de los encuestados afirma haber postergado sus pagos previstos para marzo y el 47% de los encuestados indican que en el futuro inmediato deberán postergar pagos para sostener la situación.
LA REDUCCIÓN DE ACTVIDAD EN LOS PRINCIPALES RUBROS
Medios de comunicación, mayoristas, laboratorios, inmobiliarias, financieras, farmacias, estaciones de servicio, electrónica y automotoras, el cien por ciento se mantiene en actividad. La venta de provisiones se mantiene prácticamente normal, con solamente un 6% que ha cerrado.
Entre fábricas e industrias el 88% continúa con la actividad normal, pero el 12% está cerrado. En el transporte el 83% permanece en actividad y ha interrumpido la misma un 17%. En servicios profesionales el 86% trabaja y el 14% no.
En el rubro Ferreterías el 75% está abierto y el restante 25% cerrado. La misma situación se aprecia en las agencias de viaje, bazares y compañías de seguro.
De los talleres mecánicos el 67% está abierto y el 33% cerrado. De los restaurantes, el 63% brinda servicio y el 37% no. De las agencias de publicidad trabaja con normalidad el 86%, en tanto el 14% no lo hace. En ópticas y joyerías la situación se divide en mitades, desde que el 50% está abierto y un porcentaje igual cerrado. De las empresas de industrias creativas el 57% está en actividad y el 43% no.
En el otro extremo, en los sectores más golpeados, en Indumentaria apenas el 11% del sector permanece abierto en tanto el 89% cerró ante los efectos de la pandemia. En servicios de estética solamente el 20% atiende y el 80% permanece cerrado. De los hoteles solo el 17% brinda servicios, pero el 83% no.
DEMANDAS Y ACCIONES DE APOYO
El estudio realizado por la economista Brutten incluye además un comparativo entre las demandas de las empresas incluidas en la sección “Aportes y comentarios” y las acciones ya realizadas por la Intendencia. Además parte del comercio destacó especialmente que esté cerrado el cruce a Colón, porque eso permitió reducir la pérdida de ventas. Otros comentaron que se han visto adicionalmente perjudicados por la suba del dólar, ya que se han disparado los costos.
Hubo pedidos de postergar los vencimientos de impuestos. Al momento, están postergados vencimientos de pago de Tributos, Tasas y Convenios. Hay un pedido similar sobre la rebaja y exoneración de impuestos. El estudio recuerda que se presentó ante la Junta Departamental proyecto de resolución del ejecutivo, para la exoneración y rebaja de diversos tributos, tasas y precios municipales, retroactivos al 13 de marzo de 2020 y con vigencia durante todo el año.
También se pidió mayor apoyo a la micro y pequeña empresa, las que en las exoneraciones establecidas se benefician con el 100%.
Un pedido que se repite frecuentemente es el de priorizar a proveedores locales. De acuerdo a la Intendencia “la emergencia sanitaria ha determinado la necesidad de cubrir una altísima demanda de población vulnerable, generándose un aumento sensible de las canastas de alimentación y platos diarios en los comedores municipales. Se ha priorizado a proveedores locales para el armado de las canastas, no sólo en productos secos sino además en verduras de estación. También se apoyó al emprendimiento local que está abasteciendo de tapabocas lavables a empresas del medio y a la propia Intendencia”.
Otro pedido repetido es el anular la Zona Azul, la respuesta de la Intendencia es que “si bien no está en la mira del Ejecutivo eliminar este sistema que ha funcionado correctamente durante su implantación, sí se atendió la especial situación, suspendiéndose el cobro tarifado durante el período de emergencia sanitaria”.
Para algunas empresas se hace necesario un control más estricto de las medidas de aislamiento establecidas. Según la Intendencia “si bien esta medida es de resorte nacional, tanto del Ministerio del Interior como del Ministerio de Salud Pública, se han adoptado medidas firmes con el objetivo específico del combate a la propagación del virus, como la inhabilitación de todos los espacios públicos de la Intendencia, incluidas plazas y zona balnearia, y el firme apoyo a la campaña ‘Quedate en Casa’, con generación de acciones desde los hogares a través de las Direcciones de Deportes, Cultura y Desarrollo Productivo”.
En el caso de medidas solicitadas al gobierno nacional también destacan las que se refieren a la rebaja, postergación de vencimientos y exoneración de los impuestos. Otra de las medidas sugeridas es facilitar el acceso al crédito, especialmente para las micro y pequeñas empresas.