Con unos nueve millones de dólares como capital total de inversión, el Fondo de Desarrollo-Instituto Nacional del Cooperativismo (Fondes-Inacoop) mantiene en su cartera algunas cooperativas que fueron financiadas antes de 2015, cuando el Fondes era un ente independiente, pero ha cambiado su forma de trabajar, brindando hasta un máximo de 400 mil dólares por emprendimiento. Durante 2018, se apoyaron una docena de emprendimientos y se han realizado nuevos llamados para apoyos financieros o técnicos. Se estima que son más de 3.000 uruguayos los cooperativistas que trabajan en empresas autogestionadas.
En 2015 el antiguo Fondes fue desdoblado, pasando parte de sus cuentas y capital al Fondes-Inacoop y otra parte a la Agencia Nacional de Desarrollo (ANDE) que apoya otros emprendimientos privados de pequeñas y medianas empresas.
PARA MEJORA DE COMPETITIVIDAD
Gustavo Bernini, presidente de Inacoop, dijo a EL TELEGRAFO que “después de la aprobación de la ley en 2015, quedaron algunos créditos de algunos emprendimientos donde a algunos les salió mal (y las deudas quedaron en pérdidas), otros la van remando. Pero dentro de las nuevas condiciones, dimos doce préstamos nuevos, también con las nuevas condiciones, y todos ellos van bastante bien”, y especificó que “dentro de los doce hay cuatro o cinco que son cooperativas agrarias, hay cooperativas de trabajo. En Paysandú particularmente no, pero sí está Copagran (que tiene filial allí), Coladeco, Cadol. Algunas son agrarias y otras vinculadas al reciclado, y los nuevos préstamos que se han dado implican menos recursos que los que se daban anteriormente. Y hace poco hicimos un llamado para aquellas cooperativas que busquen mejorar la competitividad o alcanzar mejoras tecnológicas que necesitaran recursos, que presenten un proyecto”. Como ejemplo, Bernini dijo que “le hemos prestado a una cooperativa de taximetristas de Canelones para traslado de personas con capacidades diferentes”.
NUEVA LÍNEA CON EL MGAP
El jerarca adelantó que “estamos por largar una nueva línea con la Dirección de Desarrollo Rural (del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca) para el sector de pequeños productores que estén cooperativizados o asociados para fortalecer el rodeo o alguna de las inversiones que se puedan necesitar a nivel agropecuario. Son fondos complementarios que hacemos con el Ministerio para apoyar al pequeño productor, para que se asocie y se formalice en cooperativas que les permita trabajar mejor, porque al tener mayor escala pueden lograr mejores precios para los insumos y mejores capacidades en la venta. En este caso es capital de inversión, pero también hay préstamos para capital de giro, pero a través de Inacoop. Pero cabe aclarar que hoy el Fondes es una parte más dentro del instituto, que tiene varios programas de fortalecimiento, tanto en formación, asistencia técnica, fondos rotatorios y fondos de inversión, que corresponden al Fondes, y todos ellos están a la demanda de los planteos que haya de las cooperativas”.
TAMBIÉN CON INDUSTRIA
Dijo que “otra línea que estamos trabajando es con el Ministerio de Industria, con determinados sectores que también puedan ingresar a la incubadora de cooperativas, donde ya hay más de veinte emprendimientos en diferentes ramas de actividad, con mayor valor agregado y más inteligencia aplicada”, y que hay “sectores de software, de producción audiovisual, de bioquímica, de metalmecánica, sectores concretos a los que hacemos llamados, se presentan varios, se hace una selección y se los acompaña”.
Afirmó que “en general está bien, cada día se van ampliando las capacidades para ofrecer mayores recursos, que no son solo económicos, también está el programa de formación que es a través del Procoop, en un acuerdo con el Inefop (Instituto de Empleo y formación profesional) donde ya han pasado más de cuatro mil cooperativistas formándose en distintos oficios o en gestión, administración, asistencia técnica o lo que sea necesario. Es una batería de recursos que tenemos para las distintas ramas del cooperativismo”.
Específicamente sobre los apoyos que dio Fondes, y cómo se están manejando, teniendo en cuenta la situación de Urutransfor, Envidrio y alguna otra, dijo que “Urutransfor no es una cooperativa, es una empresa que fue apoyada en su momento por el Fondes pero es una sociedad anónima propiedad de una asociación civil de trabajadores, pero no es cooperativa aunque nosotros continuamos con esa acción. Pero las dificultades que están teniendo no son con el Fondes (aunque tienen dificultades de pago), porque es el Banco República el que los está apretando. Tienen préstamos con el República, el Bandes y con nosotros. Pero no fuimos nosotros los que iniciamos las acciones judiciales”.
ENVIDRIO TIENE
GARANTÍAS REALES
En cuanto a Envidrio, dijo que “en ese caso están aparentemente produciendo, nosotros hicimos un reperfilamiento de la deuda cuando empezaron a producir y esa deuda está vigente con vales nuevos. Este año van a tener que pagar una parte de los intereses, y para nosotros lo importante es que tenemos garantías reales, tenemos prendada toda la maquinaria que fue comprada con los préstamos que se le otorgaron. Y en ese sentido, si bien no han cumplido, ahora están trabajando y tenemos expectativas, por eso hicimos un nuevo perfil de deuda, y de aquí en adelante se van a ir cumpliendo los vencimientos y sobre todo que tenemos garantías, por lo que este caso puede equipararse con un préstamo bancario, porque normalmente los fondos de inversión como este (el Fondes), uno de los aspectos es que quien no tiene suficientes garantías acude a los fondos de inversión, como en todas partes del mundo. Pero en el caso de Envidrio tenemos garantías reales”.
En el caso de Funsacoop, dijo que “tuvo algunos problemas de pago, pero de un préstamo de seis millones de dólares, ya pagó casi cuatro millones, y cada vez que reciben pagos del exterior, porque están exportando, nosotros estamos cobrando. Como todas las empresas del país, está remando”, afirmó.
DOS AÑOS DE BALANCE POSITIVO
Consultado sobre cómo están las finanzas del Fondes, Bernini recordó que “cuando asumimos tuvimos un gran cimbronazo porque tuvimos que pasar algunos préstamos importantes a pérdidas por empresas que no caminaron. Pero después que hicimos esa revisión, comenzamos a gestionar diferente. En los dos últimos años el balance dio positivo, el último dio casi diez millones de pesos positivo. Ahora estamos asumiendo una nueva etapa, con préstamos nuevos, que están vigentes, con buen nivel de pago, y los que veníamos gestionando de antes, bueno, con las dificultades que puede tener alguno, hay quienes ya han pagado y otros que tuvieron dificultades reales no pagaron, caso Cotrapay”.
No obstante, a juicio del presidente del Inacoop, “en general se ha equilibrado la administración del Fondes, y sobre todo nos ha permitido fondos de capital de inversión para emprendimientos nuevos, o para asistir a cooperativas ya más antiguas pero que han invertido en cambios tecnológicos que le han permitido mejorar la productividad”. Concluyó en que “en general estamos equilibrados, ya lo peor de la etapa anterior ya pasó y lo que intentamos hacer es gestionar de la mejor manera posible con los recursos que contamos, unos nueve millones de dólares, para dar posibilidades y que las cooperativas puedan tener acceso a fondos en la medida que presenten proyectos fundamentalmente viables”.
