El adiós de un Balón de Oro

Luego de una carrera ejemplar, de jugar en grandes equipos, de haber sido el mejor jugador de un Mundial, de liderar y ser determinante de una generación que levantó al fútbol uruguayo, Diego Forlán anunció el martes de la semana pasada el retiro definitivo de la actividad profesional. De 40 años, este gran futbolista dijo adiós luego de una temporada sin haber participado en ningún equipo.
“He decidido dejar de jugar al fútbol profesionalmente” luego de 21 años bajo las luces, dijo Forlán en una entrevista exclusiva para Teledoce. “Hace poco tuve una oferta para jugar, pero buscaba excusas. Me puse más selectivo y era más difícil. Sabía que estaba llegando el momento. Con los nacimientos de Luz y César prioricé quedarme, aunque tenía ofertas para jugar afuera”, añadió el delantero, mejor jugador –Balón de Oro– del Mundial de Sudáfrica 2010. Forlán jugó por última vez en el Kitchee Sports de Hong Kong.
Militó en Independiente de Argentina, Manchester United, Villarreal y Atlético de Madrid en España, con los que fue dos veces máximo anotador de la liga española, Inter de Milán, Internacional de Porto Alegre, Cerezo Osaka, Mumbai City y Peñarol, club del que es hincha y con el que salió campeón uruguayo.
También acumula dos Botas de Oro (2004-2005 y 2007-2008). El palmarés del goleador en clubes también incluye la Premiere League, la FA CUP, la Intertoto, la UEFA Europa League, la Supercopa, entre otros campeonatos.
Con la selección uruguaya marcó 36 goles en 112 partidos. Fue el máximo goleador de Uruguay tras 83 años y el primero en llegar a los 100 compromisos con la blusa celeste. Los dos tantos de la final ante Paraguay en la Copa América 2011 de Argentina se cuentan entre los más recordados por la hinchada celeste. Forlán se retiró de la selección mucho antes de dejar el fútbol, en 2015. Había debutado con el combinado de Uruguay el 27 de marzo de 2002 ante Arabia Saudita.
Dueño de una formidable visión de cancha, capaz de colocar pases milimétricos, hasta hoy no ha aparecido en el combinado celeste el jugador que pueda suplirlo en la creación de juego. Ambidiestro, podía pegarle con las dos piernas sin notarse la diferencia entre un remate y otro; se adaptó a las necesidades del entrenador de la selección, Oscar Tabárez, y se preparó para ser el mejor del Mundial 2010, algo que logró. Respecto a sus últimos pasos en el fútbol, siendo campeón con Peñarol, y luego con cortos pasajes en India y Hong Kong, Forlán dijo que le hubiese gustado terminar su carrera retornando al conjunto uruguayo.
“Hubiera sido lindo para poder cerrar la carrera en Peñarol pero las cosas no se dieron y lamentablemente no llegaron a buen puerto las negociaciones y no se pudo dar pero me hubiera encantado”, añadió en la entrevista con Teledoce. Allí también se declaró interesado en iniciar una carrera como entrenador en la que no se cierra ninguna puerta. “Hice el curso de entrenador. Unos años atrás te hubiera dicho que entrenador no, pero ahora es algo que quiero probar.
Me encantaría dirigir. Ya tengo cuerpo técnico armado con mi hermano y Santiago Alfaro. Yo quiero dirigir en Peñarol. Pero si de acá a un período de tiempo, Peñarol no me llama y me llama Nacional –y yo quiero ser entrenador– voy a dirigir, le guste al que le guste”, comentó. Entre los saludos que recibió estuvo Luis Suárez, quien le mandó un video agradeciéndole por los momentos compartidos tanto dentro de la Celeste como fuera del campo de juego.
“Como uruguayo, como niño que fui, como ídolo que te tuve, agradecerte todo lo que le has dado a nuestra selección, un jugador único que tuvo la selección, que marcó una historia y eso como uruguayos nos tenemos que sentir orgullosos”, expresó Suárez.