En un agónico final de campeonato, Estudiantil logró gritar campeón ayer en el torneo de Sub 15, tras ganar el clásico a Bella Vista por 2-0 en su escenario y aprovechar el empate de Progreso –líder hasta esta última fecha– ante Juventud Unida en el Complejo Collares (2-2).
El estudioso, además de ganar su encuentro, necesitaba un traspié del azulgrana si pretendía quedarse con el título de Honor. Progreso, el único que dependía de sí mismo, no pudo sostener su racha victoriosa, cedió dos puntos y Estudiantil sacó partido para dar la vuelta olímpica.
De este modo, el campeón sumó 42 unidades, uno más que los 41 de Progreso; en tanto, Amanecer –que batió a Guaviyú–, terminó tercero con 40 unidades.
El resto de la última etapa no llegó a disputarse.