Oscar Tabárez y el resto del cuerpo técnico de la selección uruguaya de fútbol viajaron ayer rumbo a Costa Rica acompañados por los únicos dos jugadores del medio local que fueron tenidos en cuenta, es decir Matías Viña y Giovanni González.
Sin Cavani, Suárez ni Godín, Uruguay enfrentará a Costa el Rica el próximo día 6, y el 10 enfrentará a Estados Unidos. Pero más allá de las importantes ausencias el técnico dejó en claro que “todas las funciones tácticas están cubiertas”.
“Faltan jugadores muy importantes pero que son cosas que se van dando”, que “pueden ser una oportunidad para los nuevos futbolistas”, dijo.
“No es la primera vez que nos pasa, a fines del 2018 se nos lesionaron todos los defensas, los titulares y los suplentes”, recordó, al tiempo que remarcó el hecho de que hay muchos jugadores jóvenes que han tenido experiencia en el Mundial de Rusia y la Copa América, por lo que son ellos quienes tienen “la oportunidad de ejercer un liderazgo deportivo” y colaborar con los más nuevos.
En tanto, Tabárez remarcó la importancia de las fechas FIFA, las que de un tiempo a esta parte Uruguay ha aprovechado ya que “son muy utilizables, todo lo que se vea es aprovechable”, más allá de que “vamos con la intención de defender una imagen, de hacer las cosas bien”, apuntó.
Con respecto a las nuevas convocatorias, Tabárez dejó constancia de que la decisión “es muy meditada”, al tiempo que “el objetivo es darles tranquilidad y que sepan que cuando se cita a un jugador a la selección es para que se integre y ver lo que puede dar”.
“Después lo evaluamos con el correr de los partidos. Cuando cito a un jugador a la selección, ya es jugador de la selección. No pruebo jugadores pensando que en el próximo partido ya no los voy a citar. Tampoco es garantía, porque cuanto más amplio es el espectro, más son los que quedan afuera de una convocatoria. Que tengan una oportunidad es para que puedan pelearla”, agregó.