El presidente de la Unidad Nacional de Seguridad Vial (Unasev), Fernando Longo, dijo a EL TELEGRAFO que “esta es una de las cuatro jornadas anuales que hacemos por la seguridad vial, en este caso en atención a las víctimas. Tenemos Mayo Amarillo, la Noche de la Nostalgia, la Semana de la seguridad vial y el Día de la víctima, que es internacional. Este es un punto más en el esfuerzo que se hace para disminuir la siniestralidad vial en el país, que es muy alta y pretendemos que siga bajando”. En este sentido, dijo que las cifras indican que “se va a bajar bastante el índice este año, llevamos al viernes 103 personas fallecidas menos que en 2018, lo que es aproximadamente un 25% menos, y para fin de año rondaremos las 370 personas fallecidas, que sería la cifra más baja de los últimos 10 años”.
MÁS DE 26.000 LESIONADOS
En cuanto a los lesionados, “en 2018 fueron más de 26.000 y hasta ahora llevamos 1.100 lesionados menos. De todas maneras son cifras que asustan, y lo que debemos preguntarnos es por qué nos comportamos tan mal en el tránsito, porque aunque los gobiernos departamentales, la Policía Nacional de Tránsito y todos hagamos campañas, lo fundamental es que cada uno de los ciudadanos tome esa conciencia y que cuando sale a la vía pública tome esas precauciones, desde el simple hecho de ponerse el cinturón si va en auto y el casco y el chaleco reflectivo en moto aunque vaya a tres cuadras de la casa, y respetar todas las señales de tránsito. Hay muchos siniestros que se dan a pocas cuadras del domicilio porque la gente sale confiada”.
CASI LA MITAD SON MOTOCICLISTAS
Consultado sobre qué tipo de siniestro son los más comunes, dijo que “casi el 50% de los siniestros con fallecidos son en moto, es una cifra muy alta. Otro porcentaje alto son los despistes en rutas, así como las colisiones de frente en nuestras rutas convencionales, pero el más grave son las motos. En Uruguay debemos tomar medidas más profundas con los motociclistas, los gobiernos departamentales deben fiscalizar más porque la siniestralidad en motos se da en las ciudades. Y el agravante es que un siniestro en moto tiene como resultado golpes en la cabeza o lesiones graves en el cuerpo, y en 2018 fueron más de 3.000 personas las que resultaron con lesiones graves y secuelas de por vida”.
La siniestralidad con fallecidos y heridos se divide en casi un 46% en motos, un 35% en otros vehículos, un 15% en peatones y un pequeño porcentaje en bicicletas.
USO DEL CHALECO ES OBLIGATORIO
Con respecto al uso del chaleco, que se dejó de controlar en muchos departamentos, afirmó que “es obligatorio, como el uso del casco que en algunos departamentos no se controla, y es algo terrible”, y si el chaleco es necesario durante el día, dijo que “sí, porque da mayor visibilidad. Y las normas están para cumplirse, y hay que hacerlas cumplir. A veces por error nuestro de falta de promoción, error de los gobiernos departamentales que no controlan y eso nos lleva a los altos índices”.
A su juicio, y citando un viejo refrán, “la letra con sangre entra, y hay que fiscalizar, controlar y aunque sea antipática es la que reduce los siniestros”. Puso como ejemplo que “en Montevideo, desde que están los radares de velocidad la tasa de siniestralidad descendió a 8 fallecidos cada 100.000 habitantes, y se debe a los radares y la sanción (multa) que se aplica y ahora andan más despacio. Todavía falta mucho, pero se ha mejorado”.
Agregó que en caso que las intendencias no fiscalicen, “está la Policía Nacional de Tránsito y las Brigadas de Tránsito para que controlen y hagan cumplir la Ley, porque tienen potestad para hacerlo”.
