Se cerró con buena participación celeste el Sudamericano indoor de atletismo en la boliviana Cochabamba, obteniendo la delegación de Uruguay dos medallas de oro y dos de plata.
Déborah Rodríguez obtuvo ayer la medalla de oro en los 800 metros llanos, con un tiempo de 2:14.14, imponiéndose a la argentina Mariana Borelli (2:16.99) y a la colombiana Maria Marascia (2.17.98). La atleta fernandina sumó su segunda medalla en Bolivia, luego de la obtenida en los Juegos Odesur de 2018, aunque en este caso en pista abierta.
Lorena Aires, por su parte, cumplió con los pronósticos en la competencia de salto alto y se metió en el podio continental al ganar la medalla de plata con una marca de 1,79 metros, detrás de la brasileña Martins (1,82 cm) que se quedó con el oro.
La uruguaya comenzó su camino a la presea saltando 1,70 metros en su primer intento, 1,76 y 179 metros en el segundo y tercero, respectivamente, aunque no pudo luego superar la barrera de los 1,82 metros.
Ayer también compitieron María Pía Fernández y Santiago Catrofe, ambos en los 3.000 metros, pero abandonando la prueba. Ambos habían logrado subirse al podio en las otras pruebas en las que fueron de la partida. Fernández ganó el oro en los 1.500 metros, mientras que Catrofe también tuvo un buen rendimiento en esta distancia, habiendo sido medalla de plata en la prueba masculina. María Pía Fernández dominó la carrera el sábado, imponiéndose con un tiempo de 4:31.03 sobre la boliviana Jhoselyn Carmargo (4:34.94) y la argentina Mariana Borreli 4:38.28.
Catrofe, en tanto, lideró gran aprte de la carrera pero fue sobrepasado por el brasileño Matheus Medeiros (3:56.68) y el argentino Federico Bruno (3:56.88), aunque igualmente fue medalla de plata con un tiempo de 3:58.18, dado que el ganador corrió como invitado por inscribirse fuera del plazo reglamentario.
