El pasado 30 de mayo se completó la fusión por absorción de la Cooperativa Agraria Nuevo Berlín Limitada (Conuber) por parte de la Cooperativa Agraria Nacional Copagran, oportunidad en la que directivos de ambas cooperativas agrarias formalizaron la fusión con la firma del contrato correspondiente, bajo la supervisión del escribano Rodolfo Urruty.
Mediante esta operación, Conuber se integra a Copagran y sus socios pasan a ser miembros plenos de esta última, con acceso a los beneficios comerciales, y a ser electores y elegibles en los cargos directivos de la cooperativa nacional.
Copagran, por su parte, fortalece su infraestructura incoporando una planta de acopio de 10.000 toneladas de grano, galponería de gran escala y una sede comercial en una región de tradición agrícola ganadera. A ello se suma el personal adecuado para su funcionamiento y con profundo conocimiento de la zona, el que ya está familiarizado con la gestión comercial de Copagran.
El ingeniero agrónomo Mathías Mailhos, presidente de Copagran, manifestó que este “es un gran logro para ambas empresas. Se incrementa la escala, elemento base para lograr eficiencia y capacidad de negociar, y Conuber logra mantener los activos en manos de los socios, y ofrece más alternativas de negocio para los productores”.
La fusión de Conuber comenzó a planificarse en el otoño de 2016, cuando esta empresa solicitó a Copagran asistencia técnica para su reingeniería de producción y para agregar sustentabilidad a sus planes de negocios. La cooperativa local venía de varios ejercicios disminuyendo su actividad comercial y productiva, y como consecuencia reduciendo su padrón de socios productores.
Tras las primeras reuniones entre ambas directivas hubo acuerdo en que la solución definitiva era la fusión por absorción. En una primera etapa se implementó un convenio comercial, por el cual Copagran le contrataba servicios y asistía técnica y financieramente a Conuber. De esta forma la planta pudo volver a funcionar de forma eficiente y los productores de la cooperativa pudieron proveerse nuevamente y comercializar sus productos vía Copagran.
La Cooperativa Agraria Nacional enfrentó este desafío apostando al asociativismo y con la fortaleza que le brinda su fuerte arraigo en la zona del litoral oeste del Uruguay. Todo el proceso requirió de un volumen importante de recursos, tanto materiales como de gestión.
En los últimos tres años, Copagran colaboró con la reformulación del modelo de negocios de la cooperativa local. Ello incluyó la desarticulación del servicio de recolección de leche, la renegociación de las obligaciones comerciales y financieras, y la adecuación de la estructura funcional a la nueva realidad, preservando un número importante de puestos de trabajo, a la vez que se garantizaron los recursos para el cumplimiento de todas las obligaciones emergentes.
