Daniel Radío asumió en marzo pasado como secretario nacional de Cuidados y encontró “un déficit presupuestal muy grande de 800 millones de pesos”, donde “se proyectaron actividades” que no contaban con una definición presupuestaria. El exdiputado del Partido Independiente reconoció que en la próxima votación del Presupuesto deberá encarar gestiones con los ministerios de Desarrollo Social y de Economía, y lograr su ratificación en el Parlamento.
El servicio está centrado en la primera infancia, las personas en situación de dependencia y otros dos grandes grupos como las personas mayores y discapacitados. “Desde la Secretaría trabajamos con los Asistentes Personales. El tema con los asistentes es que en el imaginario colectivo, se vinculan con la Secretaría de Cuidados. Si bien se llevan el grueso del presupuesto, no es lo único que se hace. Es uno de los servicios porque la otra gran prestación para las personas con dependencia, es la teleasistencia”, dijo a EL TELEGRAFO.
El primer caso está destinado a personas mayores de 80 años con dependencia severa o personas con discapacidad, menores de 29 años. La teleasistencia, se presta a mayores de 75 años con dependencia leve o moderada.
LA HERENCIA
“Encontramos, cuando llegamos, que acá se hacen muchas cosas bien. El gran problema es que no hay financiamiento. O sea, tenemos un déficit presupuestal muy grande que tiene relación con que se proyectaron muchas actividades y no tienen un financiamiento genuino”, explicó.
Ejemplificó que, enfrentar el presupuesto de 2020, “implica un déficit de 800 millones de pesos, no por decisiones que adoptó el gobierno que asumió en marzo, sino por herencia. Se proyectaron actividades que no se pueden reducir porque el grueso de ese gasto se va en el pago de Asistentes Personales, a quienes obviamente hay que pagarles porque están trabajando”.
Consultado sobre la “herencia” recibida, Radío reflexionó que “un poco sí, tiene que ver con decisiones adoptadas por las anteriores autoridades de la secretaría. Pero por sobre todo, tiene que ver con el presupuesto de Cuidados que votó el Parlamento hace cinco años. Y, a la hora de quitar, todos manotean del presupuesto de Cuidados”. Los recursos proyectados por el gobierno anterior “estuvieron muy por encima de lo que finalmente se aprobó. Aquel Parlamento, que tenía otra mayoría en comparación con el Parlamento de hoy, manoteó de Cuidados para otras áreas. Cuando la frazada es corta, es así”.
El exlegislador recordó que “cuando llegan los lobbys al Parlamento –como la educación, la salud o la Universidad– todos se rasgan las vestiduras, pero se va la plata de Cuidados”, por lo tanto, hasta la próxima aprobación del Presupuesto “tenemos como una carrera de obstáculos”. Según Radío, en una primera etapa deberá “hacerle comprender al Ministerio de Desarrollo Social, sobre la importancia de Cuidados, una segunda etapa es al Ministerio de Economía y finanzas y una tercera, es que se ratifique en el Parlamento. Y no son fáciles ninguna de las tres”.
Preguntado sobre la posibilidad de recortar servicios en función de los recursos disponibles, el jerarca aseguró que “tiene toda la intención” de no hacerlo. “Para eso, tengo que convencer en el sentido más primitivo del verbo que es vencer juntos porque Cuidados es bueno para toda la sociedad. Por poner un ejemplo, la crisis sanitaria nos demostró la importancia del servicio de teleasistencia. Nosotros entendemos que está subexplotado y habría que extenderlo mucho más, pero dependerá de los recursos”.
LOS SERVICIOS HOY
Un total aproximado a 4.600 asistentes personales trabajan para unas 6.000 personas y el servicio de teleasistencia comprende a 1.700 beneficiarios. Los servicios “dependen de una mirada sistémica. Los centros CAIF, los Caffi, los Centros Siempre y Centros Diurnos, implican una mirada sistémica. Los CAIF dependen del INAU, sin embargo, nosotros tenemos que coordinarlos. Y allí existen dos posibilidades, que son la continuidad de la articulación o maximizar el servicio y verlo dentro del sistema. No es fácil, a veces hay resistencias a entenderlo. Por suerte, con el presidente actual tengo mucha sintonía y puntos de vista compartidos”, precisó. Las visitas a nuevos postulantes a los servicios están suspendidas a raíz de la emergencia sanitaria.
En cuanto a los centros de larga estadía, destacó que su visibilidad “es una cuestión de sensibilidad, porque en el país de los cuidados, nos encontramos con establecimientos para nuestros viejos con piso de tierra. De esas cosas nos sorprendemos y nos pasamos culpas”.
