Trébol volvió anoche a los entrenamientos, tanto en nuestra ciudad como en la capital, siguiendo un protocolo sanitario y trabajando en grupos muy reducidos, en diferentes horarios, a la espera de una definición con respecto al inicio de la competencia del rugby nacional.
Pero, por lo pronto, se comenzó a trabajar en el aspecto físico, con grupos reducidos y al aire libre.
Los jugadores fueron divididos en grupos de hasta seis integrantes, como máximo, para movilizarse en diferentes horarios, siguiendo algunas indicaciones como por ejemplo la toma de temperatura antes de iniciar los entrenamientos.
En la cancha del Golf Club se delinearon andariveles con la separación indicada para llevar adelante el trabajo, mientras que los rugbiers de Trébol que están en la capital entrenaron en la rambla.
Así se comenzó a dar el primer paso. Fue tiempo de reencuentro, de poder nuevamente pisar el césped a la espera de que se habiliten nuevas etapas, como los entrenamientos en conjunto.
Serán al menos dos o tres semanas de trabajos exclusivamente en el aspecto físico, tendientes a ir recuperando lo perdido y volver a ponerse a punto de cara a una competencia que esta noche se anunciará cómo se desarrollará, teniendo en cuenta que habrá reunión de delegados en la Unión de Rugby del Uruguay.
Extraoficialmente se baraja la posibilidad de que la temporada pueda comenzar el 8 de agosto y terminar el 12 de diciembre.
