Un grupo de vecinos del barrio Nueva York se reunió frente a la policlínica, donde reclamaron contra la suspensión del servicio desde el viernes 3, día en que ocurrió un tiroteo en el lugar y el personal debió asistir a un baleado, ante la insistencia de quienes irrumpieron en el centro de atención. Los usuarios del servicio de ASSE pueden atenderse en las policlínicas de los barrios Municipales II o Puerto, pero rechazan tal posibilidad y demandan su pronta reapertura.
La directora de la Red Atención Primaria (RAP), la doctora Lourdes Suárez, no se encontraba en Paysandú para asistir a dicho encuentro y aclaró que adoptó la decisión de suspender la atención, a pedido del sindicato de funcionarios de Salud Pública, hasta que el organismo contrate guardias de seguridad.
“Fue herida una persona y las funcionarias llamaron al 911. Se les pidió que se tiraran todos al piso, junto a los usuarios, porque es una policlínica con muchas ventanas. La policía pidió que cerraran y después notaron que un montón de personas llegaron a la puerta. Ingresaron con el herido que fue asistido por la médica y trasladado en un móvil policial”. Según Suárez, “cuando llegué a la policlínica varias funcionarias estaban con una crisis de nervios. Allí también estaba el gremio y junto con ellos decidimos que se fueran porque no íbamos a abrir la policlínica hasta no tener seguridad. Esto no es la primera vez que pasa”. Recordó que “también ocurrió el año pasado. Pidieron seguridad y no hubo una respuesta, pero ahora es nuestra responsabilidad. Si un día le pegan un tiro a una funcionaria, hay una ley de responsabilidad penal empresarial y caigo yo”.
La directora de la RAP aclaró que “nunca tuvimos intención de cerrar la policlínica. Hicimos los trámites ante ASSE que nos aseguró que la parte de seguridad está solo en el Hospital, así que la directora de la regional Norte de la RAP, Ivonne Bruno, confirmará su reapertura. En este caso, viene una contratación de guardias de seguridad por parte de ASSE para esa policlínica, que es necesaria. Pero los funcionarios nos aseguran que han ocurrido otros hechos similares”.
En la reunión, los vecinos señalaban que el cierre sería “por dos días y ya llevan más de diez”. Sin embargo, Suárez aclaró que “nunca dijimos que el cierre sería por dos días, sino que sería un mínimo de quince días. Pero tienen que entender que no podemos exponer a los funcionarios a la muerte, porque ya pasó el año pasado otro episodio y pueden preguntar a los funcionarios. Además de la agresividad diaria que sufren por parte de ciertos usuarios que asisten a la policlínica. Es un pedido del gremio y de los funcionarios y nosotros los apoyamos”.
La jerarca aseguró que los residentes en la zona “no pueden decir que es un barrio tranquilo porque los mismos médicos y enfermeros han sufrido robos. Hace quince días, entre las 2 y 3 de la madrugada, robaron un aire acondicionado de la policlínica, que fue rescatado por la policía. Estaban aburridos de los robos, por eso colocaron rejas”. Suárez recordó que “si en ese momento del tiroteo le preguntábamos a los trabajadores, todos pedían un traslado, porque nadie quería trabajar en esas condiciones”.
En cuanto a la comparación efectuada por los vecinos en torno a la atención en el Farol Suroeste –ubicado frente a la policlínica– que nunca se interrumpió y sus funcionarias asisten desde tempranas horas, explicó que “esa es una decisión que corresponde a la institución pertinente. Nosotros tuvimos el baleado adentro de la policlínica y no ellos. El susto que se llevaron esas mujeres no está escrito y no entraron al comedor, sino que ingresaron a la policlínica. A mí me toca proteger a los funcionarios y vi cómo quedaron todos”. Finalmente consignó que “no podemos dar una solución de un día para el otro, cuando hace años que se está trabajando así”.
MINUTA DE COMUNICACIÓN
El edil del Partido Nacional, Jorge Genoud, y la edila del Frente Amplio, Libia Leites, leyeron a los vecinos una minuta de comunicación, donde solicitan, a través de la Junta Departamental, que el planteo para su reapertura sea elevado al director departamental de Salud, Carlos Leoni, al adjunto de la Red de Atención Primaria (RAP), José Flores y a la directora departamental de la RAP, Lourdes Suárez.
Consultado Leoni, precisó que aún no estaba enterado de la mencionada minuta de los ediles y aguarda conocer sus términos a fin de tomar contacto con las demandas de los vecinos.
LOS TRABAJADORES
La Asociación de Funcionarios de Salud Pública de Paysandú, respalda la decisión adoptada por Suárez y confirma que volverá la atención a la policlínica, con las condiciones de seguridad para sus funcionarios.
La dirigente Zully Dotti, coincidió con la situación extrema descrita por Suárez y los trabajadores. En tal sentido, aclaró que “en las policlínicas periféricas no tenemos equipos de reanimación y por eso el herido debió trasladarse al Hospital. Más que nada se cerró por las condiciones en las que estaban nuestras compañeras, con una crisis de nervios y eso no es lógico”.
Dotti recordó que “si bien es la primera vez que pasa algo grave, otras veces han roto la policlínica a pedradas, han rayado paredes con amenazas y no quiero decir que es un mal barrio porque todos tienen sus características. Pero acá ya venían pasando una serie de cosas”.
El sindicato, reunido con su comisión interna, acordó la suspensión de la atención “hasta que haya medidas de seguridad, tanto para los trabajadores como para los usuarios. Hablamos con la directora de la RAP y van a instalar una guardia de seguridad. Es así que, a más tardar el lunes, estaría reabriendo la atención”, dijo a EL TELEGRAFO.
