Las horas pasan entre los entrenamientos y el estudio, mientras la cabeza repasa una y otra vez las pocas posibilidades de poder tener competencia en lo que queda del año.
Pero Francisco Llanes intenta tomarse con calma este año complicado, que la pandemia de coronavirus ha puesto patas para arriba.
“La verdad es que, dentro de todo y por suerte, no fue un año tan negativo, porque generalmente no puedo estar mucho con la familia y esta vez lo he aprovechado. Y también el estudio, ya que estoy dando una tanda de exámenes”, remarcó el tenista sanducero, que pasa unos días en nuestra ciudad.
“Toto” tuvo, eso sí, la posibilidad de viajar a Brasil hace algunas semanas, y poder entrenar a buen nivel, como para no perder ritmo y seguir sumando aprendizaje.
“Estuve seis semanas en Brasil. Fui con un compañero que entrena conmigo, y la realidad es que estuvo todo muy bien, y sirvió para poder cortar un poco el tirón sin actividad”, comentó.
Y, está claro, la experiencia sirvió y mucho. “El hecho de poder jugar con otros jugadores, con un muy buen nivel, fue importante. Pudimos jugar muchos puntos, pero además estuvimos con otros entrenadores muy buenos, que nos aconsejaron algunas cosas”, sumó.
Llanes reconoció que “moverse en otro ambiente siempre viene bien, y retorné con mucha cosa positiva, de cambios que sugirieron los entrenadores para poder realizar”.
Fueron seis semanas intensas en Itajaí, ubicada a 10 minutos de Camboriú. Eso sí, el sanducero solo pudo entrenar, porque “había torneos pero solo podían participar los brasileños”.
Las expectativas con respecto a lo que puede suceder de aquí a lo que resta para finalizar el año en cuanto a competencia, es poco. Demasiado poco.
“Por ahora solo entrenamientos. Vengo mejorando en mi tenis, pero sería bueno poder jugar. Estamos viendo si es que se hace el Nacional de Primera”, lo que se espera, está claro, con los brazos abiertos.
