La pandemia del coronavirus ha impactado en las diferentes disciplinas deportivas y de distintas formas. A los jóvenes tenistas uruguayos, puntualmente, los ha dejado casi sin competición. El sanducero Juan Martín Fumeaux, que hace un año estaba con el equipo de Uruguay preparándose para afrontar la ATP Cup en Australia, no ha podido jugar un solo certamen desde febrero. La alternativa ha sido: entrenar y entrenar. Nada más.
“Mi entrenador me dijo que, como ha sido un año especial, en el que no se organizaron torneos, que me tomara el año para hacer otras cosas”, comentó “Titi” a EL TELEGRAFO. El tenista de 18 años tiene a Buenos Aires como su lugar de entrenamiento, ciudad a la que no ha regresado desde marzo debido, claro está, al covid-19. Por lo tanto, también se ha alterado su rutina de trabajo.
En el último mes y medio Fumeaux se movió en el Círculo de Tenis de Montevideo junto a otro tenista, Emiliano Troche. “Planifica mucho los entrenamientos”, indicó sobre su colega. Durante tres días, practicó en el Carrasco Lawn Tennis con Enrique “Bebe” Pérez Cassarino, capitán celeste en la Copa Davis. Antes, estuvo en Paysandú donde se aplicó a ejercitarse en el gimnasio, con muy poco tenis. Entonces, este tiempo solo ha podido “entrenar, otra cosa no hay”, subrayó. “Trato siempre de mejorar día a día, al no estar el entrenador es más complicado, que me conoce y sabe de mis defectos. Igual lo tengo al tanto, hablo todo el tiempo con él”, añadió Fumeaux.
Ahora mismo, la incertidumbre pasa por el lugar en el que hará la pretemporada en enero y febrero, si en Montevideo o en Buenos Aires. “Tengo que planear bien eso”, dijo. Mirando para más adelante, y pese a las dudas generadas por la situación sanitaria, “Titi” tiene claro que el objetivo es jugar Futures, la primera escala de certámenes profesionales. Entre tanto, descartó la idea de viajar a Europa a competir en los torneos interclubes. “Se pinchó eso, primero por el covid, y segundo porque no pude conseguir un club para jugar. Ahora, toca esperar ahora cómo arranca el año y ver para dónde arranco”, afirmó.
“Las ganas de competir son grandes, pero no queda otra que bancársela y entrenar”, concluyó Fumeaux, resignado. “Hay que reacomodarse y ver qué pasa. Deja un poco tranquilo que casi todos están en la misma y nadie está compitiendo”.
