Novillos y vaquillonas terminados en corral superarán las 270.000 cabezas

La faena de animales terminados en corrales de engorde será récord en 2020, superando las 270.000 cabezas, según informó el Instituto Nacional de Carnes (INAC). Los novillos jóvenes aumentaron su participación en el total de la faena respecto a 2019, creciendo 2,3%, y la categoría representa 14% del total procesado por la industria; mientras que las vaquillonas disminuyeron por debajo del promedio, según se informó desde el organismo.
Además, en 2020 hubo un fuerte descenso de la faena de novillos adultos, los de seis dientes cayeron 22% y los de ocho dientes 27% respecto a 2019. Algo similar ocurrió con la categoría de vacas, que se faenó 16% menos que en el ejercicio anterior, señaló el gerente de Información del organismo, Jorge Acosta.
La faena de bovinos este año terminará en torno a los 2 millones de cabezas, y este será el ejercicio de menor actividad de los últimos años, cayendo 10% por debajo de 2019. Esto es producto de una reducción de 21% en la actividad en los primeros seis meses, ya que en el segundo semestre hubo una recuperación del 3%. En INAC reconocieron que el año tuvo una actividad que fue menor a la esperada inicialmente.

Actividad industrial y exportaciones

Tampoco fue homogénea la reducción de la actividad entre las distintas empresas industriales. Desde INAC se observó una menor reducción de la actividad en las empresas más grandes, mientras que se registró actividad sólo en 30 establecimientos.
En el caso de la especie ovina, la faena de 13 establecimientos significará un crecimiento cercano al 20% respecto a 2019, ubicándose en el promedio de los últimos cinco años. Los ingresos de divisas al país por materia de exportaciones del sector cárnico se ubicaron en el promedio de los últimos cinco años.
El año 2020 cerrará con ingresos totales que en el sector serán superiores a los U$S 1.900 millones, producto de una reestructuración de las colocaciones en los mercados. Si bien hubo una reducción de 31% en los ingresos provenientes de China, aumentaron 40% las exportaciones al Nafta. Por su parte, el IMEx (ingreso medio de exportaciones de carne bovina) cerraría el año con un valor muy similar al 2019, en unos U$S 3.780 por tonelada peso canal.
Los contingentes arancelarios en 2020 verificaron comportamientos dispares. Por un lado, se verificó una elevada utilización del cupo de Estados Unidos, que fue completado prácticamente dos meses antes de finalizar el período. Por otro lado, se señaló una situación especial en la cuota Hilton. En la primera parte de 2020 no fue posible completar el cupo 2019/20, generándose un saldo del 30% sin utilizar, mientras que en el comienzo del ciclo 2020/21 hubo un ritmo de utilización superior al de 2019, completándose el 50% de dicha cuota, similar a lo que venía ocurriendo en años anteriores, cuando finalmente se completó el contingente.

Mercado interno

En cuanto al mercado interno, INAC señaló que hubo menores precios y una leve reducción del consumo. Se proyectó un descenso del consumo total de proteínas al finalizar el año. El volumen comercializado disminuye 3,3% respecto a 2019 para todas las carnes. Esta contracción se debe a una caída del 9,1% en el consumo de carne bovina, 7,2% en carne porcina y 24,1% de carne ovina. La excepción es la carne aviar, que crece 14%, de la mano de recuperación de producción nacional y de la importación, que representa 4,4%. Este último es un fenómeno reciente, y muy marginal en años anteriores, se explicó en la conferencia.
También se observa una consolidación de la importación de carne bovina, luego de cinco años de crecimiento ininterrumpido. Uno de cada cuatro kilos que se consumen en el mercado interno es de carne importada. Luego de un crecimiento inicial en el primer trimestre, y el acuerdo de precios entre el sector privado y el gobierno, se observó una disminución y estabilidad de los precios al público de las carnes bovina y aviar, que contribuyeron a disminuir la inflación.
En el acumulado a noviembre, el precio de la carne bovina registra una disminución que en promedio es de 2,89%, como consecuencia de la reducción de precio en la mayoría de los cortes, principalmente de los cortes del delantero. El precio del asado de tira, por ejemplo, bajó 15,2%, y la falda 6,9%. El precio de la carne aviar bajó 0,34% en el mismo período, mientras que el precio de la carne porcina aumentó en promedio 9,86%.