Leoni informó que del total de muertos, el 40% es con diagnóstico de COVID-19

Carlos Leoni, director departamental de Salud.

Carlos Leoni, director departamental de Salud, aseguró que si se toma la estadística 2018 de muertos en Uruguay por diferentes patologías (antes que llegara la COVID-19) y se la compara con la cantidad de muertos con diagnóstico SARS-CoV-2 en 2021, resulta que estos representan casi un 70%, que se agregan a los fallecidos por enfermedades diversas y siniestros de tránsito.

Concretamente, en 2018 fallecieron 32.600 personas, en promedio 89 por día. Desde que la variación anual de mortalidad es muy similar año año, Leoni dijo que ese número se puede tomar como base de comparación para establecer la elevada mortalidad que tiene la pandemia. Actualmente el promedio de casos fatales por o con coronavirus es de 60 por día. Eso representa un 68% de incidencia. Si se toma el número total de muertos por día (89+60), la COVID-19 es responsable del 40% de víctimas fatales.

Este ejercicio estadístico lo realizó Leoni para dejar en claro la “situación critica que vive el país y la situación critica que vive Paysandú” lo que se debe al “incumplimiento de la población de la normativa establecida para la pandemia”.

Aseguró que “Uruguay en este momento está aproximadamente en unos 3.000 casos por día, lo cual es un número muy elevado. Pero otra cosa que marca el estado crítico es el hecho de las camas de CTI ocupadas en todo el Uruguay. Entre 520 y 550 camas es un número de ocupación es muy elevado. Con ese parámetro que nos permite medir la situación crítica que estamos viviendo va de la mano el número de muertos en el país”.

“OLEADA GRANDE DE MUERTOS”

En los últimos 15 días “estamos ante una oleada grande de muertos, pero que comienza después de marzo. Estamos en una situación de alarma que me parece que es bueno que se conozca para que tomen la responsabilidad que le corresponde a cada uno de los ciudadanos del Uruguay”.
“Paysandú sigue perfectamente los pasos de todo el país, con un promedio en los últimos 15 días de 75 casos”, dijo y detalló lo que ocurre” en el caso de las camas CTI en Paysandú oscila entre 19 y 20 camas por día, entre los dos prestadores. Es un número elevadísimo de camas de CTI que están permanentemente ocupadas. La población tiene que saber además que quienes están internados en CTI no son solo los adultos mayores sino también personas jóvenes. Hay 40% de menores de 50 años. Comprendan, ahora los jóvenes también pueden morirse. Tienen que tomar conciencia de esa situación”.

Volviendo sobre el tema de las víctimas fatales con diagnóstico SARS-CoV-2, “si se considera la relación del número de muertos en 60 días, entre el 14 de enero y el 14 de marzo murieron 7 personas. Pero si tomamos los últimos 51 días, llevamos 43 muertos. Es un numero que rompe los ojos. Estamos en una situación crítica y evidentemente que la población no responde de acuerdo a la situación. Es algo tan grave incluso por las edades de quienes murieron, personas de 32, 35, 38, 42, 49, de 52 años. Son personas jóvenes. Además tenemos una puérpera, una mujer muy joven luchando por su vida. La situación es crítica en todo sentido. Esto tiene que alarmarnos”.

VARIOS POSITIVOS QUE NO ACEPTARON LA SITIUACIÓN

Tras recordar que “cuando una persona es positivo tiene que estar en cuarentena y no puede salir a la calle, los integrantes del núcleo familiar que viven esa casa no pueden salir a la calle, tienen que estar en cuarentena”, contó una serie de hechos descubiertos en los últimos días en Paysandú que no respetaron eso. Concretamente tres casos, el de un hombre que siguió trabajando y contagió a sus hijos; el de un comerciante que se negó a cerrar su comercio; y -el más sorprendente- docentes de recursos humanos para la salud que, aunque infectados, realizaron una reunión y luego se fueron a almorzar, desoyendo la orden del Ministerio de Salud Pública de proceder a hisoparse.

“Un hombre que teniendo su esposa positiva y en cuarentena, es sometido al hisopado pero no cumple la cuarentena. Fue a trabajar y lo siguió haciendo por días hasta que fue informado que era positivo a COVID-19. En ese mismo momento se le confirma que sus hijos son positivos. Toda su familia enferma y además no está claro cuántos contagios pudo esparcir en su trabajo. Realmente, le pedimos por favor que reaccionen. Entiendan la responsabilidad”.

“Otra persona, vinculada al transporte, dio positivo pero se reintegró al trabajo. Cuando es visitado por autoridades para comunicarle que se le tiene que hacer una intimación por fallar la cuarentena, dice que está de alta. Miente que está de alta en realidad. Si se cometen ese tipo de irregularidades, es imposible que podamos salir de esta pandemia”.

“Una institución privada que forma recursos humanos para la salud, internacional con sede nacional, hizo algo realmente sorprendente. Directivos y docentes de esa institución vinieron a Paysandú. En el camino los llaman y les dicen que están en cuarentena. Los habían ido a hisopar y no estaban. El Ministerio les informa que no pueden hacer esa reunión. Se les ordena que vayan al hospital a hacerse el hisopado. Lejos de eso, hicieron la reunión. Cuando no llegaron al hospital, nos dimos cuenta. Salimos a buscarlos en Paysandú. Estaban almorzando. Los conminamos que tenían que hisoparse y terminaron yendo al hospital, donde se les hizo el hisopado. Estamos en una situación extremadamente crítica. La gente no cumple con la cuarentena ni aun siendo COVID-19 positivo. Y más difícil si quienes son responsables de recursos humanos de la salud, no cumplen con las normas de salud, no sé qué le van a enseñar a los alumnos”.

“RECLAMAMOS CONCIENCIA”

Finalmente Carlos Leoni aseguró que “reclamamos que tomen conciencia; cada uno es totalmente responsable de lo que nos pase. Podemos hacer lo que queremos con nuestro cuerpo, pero no podemos llevar la enfermedad al trabajo y menos esparcirla por la comunidad entera”.

Y reafirmó: “están cometiendo un error muy grave que nos va a costar varias vidas. Fíjense el numero de muertos que tenemos en Paysandú. Por lo tanto llamamos a la reflexión y lo único que pedimos es que hagan el esfuerzo máximo de pensar que pueden contagiar a compañeros de trabajo, padres, hijos, abuelos. Si no nos volvemos más responsables y no disminuimos la circulación y actuamos con responsabilidad, va a ser muy difícil vencer esta pandemia”.