En la planta de Alcoholes del Uruguay (ALUR), “hablamos con el nuevo gerente general, Álvaro Lorenzo, viendo las posibles inversiones que se harían tratando de generar una ecuación económica mejor para que lo que después se le agrega a los combustibles tenga el menor costo y que redunde en que los combustibles no se encarezcan. En esa política viene Ancap, y estamos teniendo una reducción importante de los costos de los bio combustibles que redunda en un mejor precio para el combustible que se compra en las bocas de las estaciones”.
Con respecto al porcentaje de mezcla del etanol y el biodiesel con las naftas y el gasoil, Charamelo dijo que “eso sigue manteniéndose, tenemos un 9,8% de etanol por cada litro (de nafta) que se vende en la estación de servicio, que es una mezcla del etanol que se produce en Paysandú con grano y en Bella Unión con caña de azúcar. Estamos en el límite máximo que pide la ley, y se plantaron un poquito más de hectáreas de las que se venían plantando, por lo tanto la producción no va a disminuir. En eso estamos en lo mismo que en el promedio histórico”.
Con respecto al diesel, dijo que “tenemos diferencias pero estamos más o menos en el 5% que se le agrega al gasoil. Pero ahí ya tenemos otras flexibilidades, dependemos de los precios de los granos, si vale la pena agregarle un poco más, pero estamos en los valores históricos y no hubo modificación hasta ahora”.
Según afirmó el jerarca, “cuando se fija el precio del azúcar es con el 2,21 más, es decir que se multiplica en más del 200% el valor del precio PPI internacional. El país hace un subsidio para mantener un negocio que obviamente, si lo lleváramos simplemente a números, no sería rentable. Pero no estamos hablando solamente de rentabilidad económica, sino que estamos hablando de un negocio que es muy importante, sobre todo para las zonas alejadas donde no hay ‘plan B’”.
Mantendrán la producción de etanol
Con respecto a la producción de etanol, especificó que “lo que estamos haciendo es bajando gorduras, excesos, tratando de administrar sabiendo que no es un negocio competitivo, pero que de ese negocio dependen miles de familias en todo el país; y hablo del proyecto ALUR de aquí, de la planta Capurro de Montevideo y la de Bella Unión”, y que “son negocios que se crearon en un momento en que el país aportó mucho, y si lo miramos con los precios internacionales estamos lejos. No en la planta de Paysandú, sino cuando mezclamos el alcohol de la caña de azúcar. Los precios internacionales andan PPI en unos 700 dólares el metro cúbico de etanol, y en Bella Unión el costo es de 2.300 y aquí (en Paysandú) andamos en poco más de 800 dólares. Pero en el contexto general tenemos un promedio de 1.500 dólares el metro cúbico. Y ese es un subsidio que da el país, que apuesta a consolidar trabajo y desarrollar zonas que hoy no tienen un plan B”.
Dijo que para bajar costos, “estamos mejorando el tema del riego, los fletes, algunos excesos y que la productividad aumente”. A su juicio la producción de etanol “es muy importante y debemos mantenerlo”, en cuanto “apostamos a la calidad de vida de la gente, a desarrollar el país profundo y que la gente no se vaya del campo a competir por un trabajo en la ciudad”.
