En Paysandú se evaluaron 44.196 vientres con un 81,1% de preñez

La diferencia de los resultados en Paysandú se explica por la diferencia de lluvias en la zona.

Datos difundidos en el XIX Taller de Gestación de INIA, coordinado por la ingeniera agrónoma Graciela Quintans, indican que en el departamento de Paysandú se verificó el mejor porcentaje de preñez en el ganado, al evaluarse 44.196 vientres, que arrojaron 81,1 por ciento.

El doctor en medicina y tecnología veterinaria Lauro Andrés Artía Almirón, responsable de brindar la información en la actividad, sostuvo que en Paysandú, hubo una “enorme dispersión de resultados, desde rodeos que no llegaron a 40% de preñez y muchos con resultados por encima del 90%”, aclarando que se explica por la diferencia de lluvias por zona.
En el resultado global presentado por el profesional sanducero, de las 44.196 vientres, se preñaron 35.824 (81,1%). El dato corresponde a información proporcionada al doctor Artía, por los médicos veterinarios Sebastián Belassi, Agustín Álvarez, Víctor Álvarez, Ana Burjel, Lorena Lagreca, Serafín Ceriani, Paula Ortíz, Virginia Texeira y Andrés “Tero” Hiriart.

En el resultado por departamentos, en Paysandú se realizó diagnóstico de gestación a 22.598 vientres, siendo preñados 18.188 (80,5%); en Río Negro de 8.953 vientres, se preñaron 7.226 (80,7%); en Salto, de 1.739 vientres se preñaron 1.169 (67,2%); en Artigas, de 3.875 vientres se preñaron 3.338 (86,1%); en Tacuarembó de 2.100 se preñaron 1.939 (92,3%); y en Soriano de 4.931 vientres, se preñaron 3.965 (80,4%).

Otros departamentos

En los demás departamentos, en Durazno, con 72.288 vientre evaluados, tuvo un promedio de preñez de 75,5%; Salto y Artigas: 86.336 vientres evaluados y 76,1%;; Colonia y Florida: 64.670 y 80,9%; Lavalleja: 69.905 y 76,2%; Rocha: 23.728 y 71%; Cerro Largo: 31.595 y 74,1% y Treinta y Tres: 35.921 y 71,4%.
Hasta ahora, a nivel país, la tasa más baja de diagnósticos de preñez se registró en 2003 –según los datos emanados de estos talleres de gestación de INIA Treinta y Tres–, con 69,7% y el mejor nivel fue en 2013, cuando se llegó a un promedio de 81,5%.

Está claro que en los departamentos del litoral norte, hubo mejor régimen de lluvias y eso ayudó a mejorar la condición corporal del rodeo, preñándose en mayor porcentaje que en el sur. En octubre, noviembre, diciembre y enero, hubo factores climáticos que incidieron en las preñeces, porque afectaron la nutrición de los vientres. “Los rodeos que se entoraron antes, se desfavorecieron contra entores de fines de noviembre, diciembre y enero”, explicaron Diego y Eduardo Texeira. A pesar de haberse obtenidos resultados más favorables en el litoral norte que en el sur, se bajó dos puntos las preñeces frente a 2020 y es el segundo año con caída consecutiva.

En muchas zonas, incluso en las que venían complicadas, porque salían de una seca (como los departamentos del este), hubo mejores niveles de preñez que los esperados. Por otro lado, con regímenes de lluvias diferentes, en el litoral norte se registraron niveles de preñez mejores que los vistos en los departamentos del sur.
En Durazno, “hubo tendencia a atrasar los servicios con gente que estiró el entore y eso generó algunos puntos más de preñez”, explicó Santiago Bordaberry. “Se mantiene el interés por la cría y hay más cuidado en revisión de los toros”, detalló.

En Rocha, que venía muy complicado, “los productores mantuvieron los vientres fallados del año anterior y apostaron a la cría. Eso explica que se haya, prácticamente mantenido el promedio del año anterior”, sostuvo Emilio Machado.

Durante el desarrollo del taller, aportaron sus datos los veterinarios: Ignacio Paiva (Centro Médico Veterinario de Treinta y Tres), Santiago Bordaberry, Gustavo Sacco, Pablo Nietto, Lauro Artía, Pablo Marinho, Emilio Machado, Juan Andrés García Pintos y desde el norte del país, Diego y Eduardo Texeira.