Los dos grupos de Quinto año, A y B de la escuela 96 de nuestra ciudad realizaron una visita a Nativas de San Francisco, en el marco de un proyecto escolar que llevan adelante, denominado Mi huella ecológica. Alexandra Nóbile, una de las maestras, dijo a EL TELEGRAFO que el proyecto “surgió de parte de los niños; arrancó porque el año anterior habían hecho otro que se llamaba ‘Adopta un Árbol’, lo llamaron así ellos, donde adoptaron un árbol específico en la escuela y lo estudiaron”. Como parte de este proceso investigaron “su nombre científico, sus características, de dónde provenían, y de ahí surgió la idea, por la dueña de este sitio, Nativas de San Francisco, de identificar especies autóctonas acá en este lugar”.
En el marco del proyecto anterior se colocaron carteles en los árboles de la escuela. “Hicieron alianza con el colegio Nuestra Señora del Rosario y ellos les elaboraron carteles caseros en los que pegaron los códigos QR, de ahí la propuesta era que la persona que visitara la escuela pudiera leer, tener acceso a través de esos códigos a textos explicativos, porque también se trabajó desde el área Lengua, no solo desde Ciencia”, señaló la maestra.
VISITA
Durante la recorrida se reconocieron especies autóctonas, “tanto de flora como de fauna”, de la mano de guardaparques que concurrieron desde Montes del Queguay y de Esteros de Farrapos, más el guía del establecimiento, Pablo Silchenko, integrante de Gensa, quienes se repartieron los grupos de escolares, 43 niños en total. “Les pedimos que solamente les mencionaran los nombres comunes, para que ellos puedan investigar los nombres científicos, y demás información”, agregó Nóbile.
La presencia de los guardaparques se coordinó con la regional del SNAP. “Esto surgió porque en quinto tienen como contenido programático trabajar las áreas protegidas, estuvieron trabajando qué áreas protegidas hay cercanas a Paysandú”, indicó.
Por su parte, la docente a cargo del otro grupo, Silvia Sánchez, destacó que el proyecto se desarrolla en coordinación con otras instituciones, como la escuela 41 de Puntas de Cangüé, y la escuela 7, rural, de San Francisco. Además han trabajado en comunicación con Cecilia Camacho, “que es la botánica paisajista que está encargada del arbolado en las plazas”.
Relató la maestra que todavía no pudieron ponerse en contacto con el intendente Nicolás Olivera, “por el tema de la cartelería, porque los chiquilines, como el proyecto se llama ‘Mi huella ecológica’, vieron que en el lugar no hay cartelería, entonces ellos, identificando y estudiando sobre los árboles, querían poner la cartelería en alguno, por supuesto no en todos”.