Todo comenzó en Il Panettone. La familia Giacomoni tiene 31 años de trayectoria y desde hace tres, está al frente de Confitería Juan’s.
El principal de la empresa, Francesco, recuerda que “siempre hemos sido una empresa familiar, con personal a cargo. Pero el inicio, la base y los pilares principales son la familia. Hemos tenido altibajos porque ha sido un rubro que ha sufrido, como todos. Con la excepción del pan, porque es el producto más solicitado”.
La pandemia los encuentra trabajando y reinventándose, en tanto la empresa maneja otro sector que sufrió los embates de las restricciones sanitarias. “Bajó la venta en la confitería porque estuvimos un año y medio sin eventos ni servicios”.
Sin embargo, la modernidad atrajo algunos problemas de salud, pero también están aquellos que toman conciencia de esas afecciones. “Lamentablemente aumentan los casos de diabetes e hipertensión. Y si bien la sal es todo un tema, también notamos que hay un público que pide productos sin sal por la necesidad de cuidarse o comer sano. Las materias grasas han mejorado mucho en estos años”, asegura.
O, lo mismo para el azúcar: “en la confitería hacemos postres sin azúcar. En Il Panettone, elaboramos merengues sin azúcar en forma exclusiva para Montevideo, donde hay otro mercado porque se manejan otros costos”.
Además, la empresa está en ciudades del litoral y en la capital del país. “Nuestra empresa se ha expandido. Llevamos nuestros productos a Salto, Young, Mercedes, Fray Bentos, porque tenemos un gran equipo humano. Son más de 30 personas en estos momentos que trabajan en turnos durante las 24 horas, los siete días de la semana. Armamos un grupo humano que tiene la camiseta puesta”, recalca.
Y no pueden faltar aquellos que aportan los insumos diarios para la elaboración. “Con el paso de los años veo que hicimos una correcta selección de los proveedores para la utilización de la materia prima. Por ejemplo, tenemos el mismo y único proveedor de harina desde hace 31 años, cuando iniciaron mis padres”.
Porque la familia se agrandó y trabajan a la par. “Nosotros somos tres hermanos en la empresa e incorporamos a nuestras familias al proyecto. Ese es el secreto de la permanencia. Es la conducta, la responsabilidad y el servicio que nunca ha parado de crecer”.
Ni con tiempos de dificultades, porque la familia se apegó a las inversiones para llegar a más consumidores. “Siempre tuvimos unos años más complicados que otros, pero crecimos porque incorporamos maquinaria. Hoy somos una de las panaderías del Interior con mayor equipamiento industrial y en pocos días ingresará la denominada ‘tren de laboreo’. No existe una igual en el litoral”, asegura.
Sin embargo, aclara que “nunca hicimos las inversiones con el propósito de eliminar mano de obra, sino para que el operario tenga la comodidad necesaria para trabajar y así incrementar las ventas. Yo me siento una persona bendecida por trabajar en lo que me gusta. Lo hacemos con mucho amor, porque estamos convencidos de lo que hacemos y nos encanta”, destaca Giacomoni.
La confitería Juan’s ya inauguró su nuevo local en la esquina de 18 de Julio y Vizconde de Mauá. Junto a Il Panettone, con renovado mobiliario en Estefanell y Roldán, se suma la planta industrial.
