El día de ayer, se realizó la reunión semanal de la Liga de Fútbol de Paysandú, en la cual se trato el tema tanto de los jueces como de la seguridad para los partidos. Estos temas han sido más que polémicos en los últimos días debido a los reiterados casos de encuentros suspendidos por motivo de falta de árbitros, por lo que, además de la ya realizada reunión con el Colegio de Árbitros, se puso el tema sobre la mesa en la reunión semanal.
Al momento de tratar el porqué de esta ausencia de árbitros, una de las razones principales que se planteo fue que los jueces prefieren arbitrar encuentros de otras ligas, como la Liga Master o la Liga de Fútbol Senior, en vez de los encuentros de los torneos de primera división. Debido a esta preferencia, no se encuentran jueces disponibles los sábados en la tarde, ya que estos arbitran las ligas ya mencionadas a esas horas.
Ademas de esto, Walter Arrúa recalcó que esto repercute también en los rendimientos de los colegiados, ya que cuando los llegan para arbitrar un encuentro poco después de las 6, lo hacen ya con más de 5 horas de arbitraje, y su rendimiento dentro de la cancha se podría ver afectado.
De igual manera, debido a que el contrato de la Liga con los jueces no plantea una exclusividad por sobre otras ligas, no se encuentra dentro de los marcos de este el pedirles que den prioridad a ciertos encuentros.
Otro tema relacionado con el anterior, es el de la seguridad en los partidos, ya que la ausencia del personal ha provocado la suspensión de más de un encuentro en las ultimas semanas.
Nestor Manzor, presidente de la Liga de Fútbol, planteó como solución de este problema el uso del sentido común y la cooperación.
Como ejemplo de esto, sugirió que si faltara tan solo un miembro del personal de seguridad, de los tres que están establecidos, los jueces sean flexibles, y luego de hablar, tanto con delegados como con capitanes de ambos equipos, jueguen de igual manera el encuentro, y en caso que ocurra algún altercado, se suspenda el partido.
Por lo que se sabe en la Liga, son los directivos gremiales los que piden a los jueces que los encuentros no se disputen si no se dan los términos acordados.
