Antes de comenzar los actos protocolares en la plaza Constitución, en conmemoración del centenario de la creación del Destacamento de Bomberos de Paysandú, un efectivo que cumplió funciones en la citada repartición y resultara lesionado en un acto de servicio hace cinco años, se encadenó cerca del lugar donde se encontraban las autoridades locales y nacionales.
César Emiliano Ramírez vive en Paysandú, y al momento del hecho se encontraba de servicio en el destacamento de Carrasco. Al concurrir a un incendio y tomar acción con una manguera, “la fuerza de la bomba lo tiró hacia atrás y golpeó su columna vertebral contra las barandas de metal del camión cisterna. Cayó al piso y se fracturó dos vértebras”, dijo el dirigente del Sindicato Único de Policías del Uruguay (SUPU), Alejandro Álvarez, quien acompañaba a Ramírez.
Explicó que “llegó a la instancia de encadenarse en la plaza, debido a que desde hace 4 años reclama por su situación sanitaria y no tuvo respuestas. Resultó lesionado en acto de servicio y tiene fracturadas dos vértebras por un mal manejo en un procedimiento de Bomberos”.
A retiro
El SUPU conoció su situación un año después y comenzaron los trámites. “En los últimos años, la documentación fue presentada en Asuntos Internos del Ministerio del Interior y en la institución de derechos humanos, pero no tiene solución. Hace un mes lo desalojaron por falta de pago”, dijo a EL TELEGRAFO.
Según el dirigente, “la ley es clara, porque su caso fue un acto directo de servicio y no se lo reconocen. Hay fallas administrativas reales, por eso llegó a esta instancia. Cobra un subsidio transitorio del 65 por ciento que no corresponde porque es un acto de servicio. Hace tres días que tratamos de dialogar, pero quedaron en llamarlo, por eso resolvió tomar esta medida”.
Minutos previos al comienzo de la oratoria, se acercaron autoridades locales y nacionales encabezadas por el Jefe de Policía, Eduar Alvez de Almeida, y el Director Nacional de Bomberos, Ricardo Riaño, quienes dialogaron con Ramírez para conocer su situación. El jerarca nacional se comprometió a buscar una solución y coordinó en el lugar una entrevista para recibirlo en Montevideo, el próximo lunes. Minutos después, resolvió levantar la medida.
Álvarez acompañará a Ramírez al encuentro porque “sé muy bien, de primera mano, por todo lo que ha pasado. Conozco su situación laboral por los trámites administrativos, pero también familiar”.
En la capital del país gestionará su salida del Subsidio Transitorio por Incapacidad Parcial (STIP). “Además, que se reconozca el acto de servicio y le paguen lo que corresponde que es una jubilación, de acuerdo a lo estipulado por la Ley 18.405. Es decir, pasará a retiro con 33 años de edad debido a las consecuencias de las lesiones, con unos 9 años de servicio”.
Ramírez, quien se excusó de realizar declaraciones para aguardar la reunión con las jerarquías de la Dirección Nacional de Bomberos, señaló que siente dolor en la columna las 24 horas del día y adormecimientos en piernas y brazos que le impiden hacer otras actividades.
