Ganado resiste a la espera de precipitaciones, mientras el mercado agrícola baja sus precios

El mercado de granos baja sus precios y la soja puede mejorar su cosecha con la lluvia.

La demanda firme cerró una semana con valores estables para la hacienda gorda y la situación climática y forrajera impulsó un aumento en la oferta de ganado sin terminación, bajo las expectativas de las lkuvias para los próximos días.

La industria sigue desigual, con entradas de 8 a 17 días y con diferencias en los valores, mientras algunos frigoríficos hicieron compras anticipadas.

Es poca la oferta de novillos especiales, en tanto los lotes excepcionales pueden cruzar los U$S 4,45 por kilo, con un valor general entre U$S 4,35 y U$S 4,40. La vaca gorda ronda U$S 4,10, con negocios que alcanzan los U$S 4,15 y es una categoría con mayor participación en la faena de la primera semana del año.

Los precios mantienen fluidez en el mercado que refleja un alto volumen de faena, con un sostenido interés industrial.

La faena alcanzó a 47.629 vacunos en la primera semana de 2022, un 26% superior al volumen registrado un año atrás, a pesar del paro de la Federación de Obreros de la Industria de la Carne y Afines (Foica).

Los novillos tuvieron una participación de tan solo 42% y se destacó el volumen de vacas con 20.074 cabezas, o un 46% más que en la misma semana de 2020.
Si se concretan los pronósticos de precipitaciones, posiblemente afloje la oferta de ganado con menor terminación.

Por el mundo

s mercados mantienen la firmeza, pero sin la pujanza del segundo semestre del año pasado, en particular de China. Europa sostiene restricciones vinculadas a la nueva ola de la COVID-19 pero con preferencia por el Rump & Loin argentino. La tonelada exportada de carne vacuna empezó el año con solidez de valores, arriba de los U$S 5.000 por tonelada, de acuerdo a datos preliminares del Instituto Nacional de Carnes. El volumen exportado fue muy bajo, de apenas 3.565 toneladas.

En el mercado de reposición el nivel de oferta ha sido moderado. Los precios se han mantenido y no hay mucho volumen de negocios. No se ha registrado una caída de valores como podría esperarse en un escenario extremo como el actual, de falta de lluvias.

CARNE OVINA

En lanares el mayor interés es por el cordero pesado, con preferencias por carcasas más livianas para oveja y cordero. El cordero mamón cotiza en U$S 4,02 y el pesado en U$S 4,23.

Una menor demanda desde el mercado chino por carne ovina empezó a verse desde el último trimestre del año pasado. Mientras, cobró protagonismo Brasil, que a fines del año bajó notoriamente su demanda y espera una reactivación en las próximas semanas.

ena comenzó el año con buen nivel de actividad, con 22.310 animales y niveles comparativamente altos respecto a 2020 y 2021. Fueron 13.000 cabezas más que en el arranque del año anterior.

El precio de exportación para la carne ovina tiene un piso sostenido de U$S 5.000 desde fines de julio del año pasado. En la última semana con un valor de U$S 5.112, levemente por debajo del promedio de las últimas cuatro semanas móviles, de US$ 5.370.

mercado agrícola

Baja el precio de los granos en el mercado de Chicago que, al menos en Uruguay es bienvenida, mientras se esperan las precipitaciones.

El Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) actualizó proyecciones diversas que tuvieron signos de sentido contrario. La sequía provocó un daño irreparable sobre la producción del Mercosur, especialmente al Norte de Uruguay, los estados de Paraná y Río Grande del Sur, el centro y Norte de Argentina y Paraguay. El ajuste de la producción de los países vecinos que hizo el USDA fue importante tanto para Argentina como para Brasil.

La reducción de la producción prevista en Brasil en 5 millones de toneladas –de 144 millones a 139 millones de toneladas– y de Argentina de 49,5 millones a 46,5 millones de toneladas, generó una primera reacción positiva. El stock mundial fue recortado de 99,8 a 95,2 millones de toneladas.

El otro factor que pesa en el mercado es la producción sojera en Estados Unidos que resultó muy buena, con 120,7 millones de toneladas que permiten una recuperación de las reservas algo mayor a la prevista por los privados.

Las existencias de Estados Unidos pasan de 7 millones de toneladas a mediados de 2021 a 9,5 millones a mediados de 2022. Eso se complementa con un ritmo de exportación de soja de Estados Unidos que es notoriamente más bajo que el año pasado.

En el balance, la soja bajó y eso llevó a que el precio al productor uruguayo perdiera las referencias de algo más de U$S 500 que traía para la cosecha 2022 y quedará sobre los U$s 495.

El maíz y el trigo en Chicago acompañaron los descensos, especialmente el trigo. La excelente cosecha de Argentina y Australia pesan en el mercado y la suba de área de trigo en Estados Unidos, aunque leve, consolidó un sentimiento a la baja que se hizo sentir en el mercado uruguayo. Aquí el cereal bajó a U$S 260 y acumula un descenso de U$S 20 por tonelada desde la cosecha en noviembre.

La semana próxima se sabrá si se recuperan los cultivos de maíz, mientras que otros productores siembran en seco a la espera de las lluvias.
En cuanto a la soja, las precipitaciones auguradas para la segunda quincena de enero, pueden mejorar la cosecha.