Ni “indios contra poderosos” ni demócratas contra totalitarios

A medida que nos acercamos a la fecha de la consulta popular respecto a la derogación o no de 135 artículos de la Ley de Urgente Consideración (LUC), cuestionados por el Pit Cnt, el Frente Amplio y organizaciones satélites, lamentablemente se viene planteando gradualmente el temido escenario de pugna de eslóganes, descalificaciones y cuestionamientos que apuntan a la desinformación, parcialización y/o falsa “información” sobre el tema, en aras de llevar agua hacia los respectivos molinos.
Citemos algunos ejemplos claros, entre la enorme gama de “razonamientos” y “argumentos” que se difunden a través de los medios –ni que decir dentro del monstruo de desinformación, intolerancia y agresividad en las redes sociales– para engañar a la población o inducirla a votar la papeleta celeste o la rosada, por el No y el SI respectivamente.
El dirigente político del Frente Amplio (FA) y vocero de la Comisión Nacional por el SI Rafael Michelini, al referirse este miércoles a la campaña que se aproxima por el referéndum contra los 135 artículos de la LUC, aseguró que es una campaña “de los débiles”, “de los indios”, contra los “poderosos” (¿?).

Entrevistado por Telemundo (Canal 12), y de acuerdo a lo recogido por Montevideo Portal, Michelini aseguró que, naturalmente, “es una campaña sin recursos” la que realizará el SI, pero invitó a que la gente se ponga a los hombros la campaña y que salga “barrio a barrio, casa por casa y ciudad a ciudad” a explicar lo que significan los 135 artículos. “Cuando uno los explica eso ya está para que la gente vote por SI, entre otras cosas, el aumento del combustible”, indicó.
“¿A quién se le ocurrió que el Estado deje de ser amortiguador? Antes era una vez por año que se corregían las tarifas, ahora la corrigen todos los meses. O sea, puede más el mercado que el Estado, y el Estado pierde su rol de amortiguador”, criticó.
Por otra parte, pidió “apropiarse al máximo del color rosado. Ellos hicieron un acto injusto, que es poner el celeste, adjudicarse el celeste, eso fue injusto, una cosa mala, que no corresponde, pero nosotros nos apropiamos del color rosado y pintar la ciudad toda de rosado”, pidió.

“Que la gente que vaya con una camisa rosada, con un pañuelo rosado, que esté con algo rosado, que las casas tengan algo rosado, que no sea la balconera porque no sé si vamos a llegar con tantas balconeras a tantas casas, pero que ponga un lienzo rosado, que ponga en su vehículo un pañuelo rosado. El rosado por todos lados, ese va a ser uno de los distintivos de nuestra campaña”, agregó.
El dirigente de izquierda dijo que en la etapa final de la campaña habrá actos, múltiples actos en plazas y lugares concurridos, pero que también habrá “barriadas” explicando los “nefastos 135 artículos. Uruguay es libre y todo el mundo puede defender sus ideas. Pero, la verdad, hasta ahora en todos los departamentos los ediles y algunos diputados ni idea tenían de la LUC. Por lo tanto, que salgan a explicar lo que significa esta ley me parece bueno, porque en definitiva van a tener que explicar por qué a los colonos les dan tierra y por arte de magia pueden vivir en Montevideo y en Punta del Este”, indicó.

“Los artículos de la LUC no son contra los delincuentes, son contra los ciudadanos honestos. Si usted va a parar a un narcotraficante para pedirle la cédula… lo primero que saca es un revólver y se balea. Todos esos artículos de revisión agarrarán a algún pequeño, microtraficador, pero es contra los ciudadanos. Son molestias contra los ciudadanos”, concluyó en declaraciones al medio anteriormente mencionado.
Es decir, de todo menos explicar lo que realmente contienen los 135 artículos cuestionados, sino poniendo las cosa en blanco y negro, con una fárrago de inexactitudes y falsedades que solo se “justifican” en intenciones ideológico-electorales.
Por otro lado, la Coordinadora por el NO de Salto se desmarcó de una publicación en el diario Cambio en defensa de la LUC, en la que señala que “Mao y Stalin mataron 150 millones” y son “padrinos” de “muchos” defensores del SI. Por más que la primera parte sea un hecho cierto, el vincularlo con una campaña por mantener los artículos de la LUC no tiene relación con lo que debería explicarse a la población que aún no está interiorizada de la vasta problemática a que se refiere la LUC. Es por lo tanto un golpe bajo, sucio y carroñero que mancha la campaña llevándola en una dirección contraria a los valores democráticos que posicionan a Uruguay entre las más sólidas democracias del mundo, y por lo tanto merece el repudio de todos os sectores.

Es sensato por lo tanto que la Coordinadora de Salto por el NO Deroga emitiera un comunicado de la publicación en defensa de la LUC, en el que expresa que “los integrantes de los cinco partidos políticos de la Coalición de Salto No Deroga reitera su compromiso de llevar el debate por la defensa de la LUC basado únicamente en la discusión de los 135 artículos, defendiendo la libertad y los derechos por esta ley conquistados y son el punto de partida de los cambios que votamos en 2019. Todas nuestras publicaciones están debidamente identificadas con los logos de la Coordinadora y de la coalición de gobierno”, por lo que entienden que la publicación es de carácter sectorial o individual y no representativa del sentir de la coordinadora.
Pero estos episodios son válidos para ilustrar sobre el sesgo que está adquiriendo la campaña de protagonistas de uno y otro bando en aras de defender a ultranza su postura, en una actitud intolerante pero peor aún, donde lejos de confrontar visiones y argumentos, se trata de esquematizar, de descalificar, de distorsionar, de atribuir intenciones retorcidas, de poner “indios” contra “poderosos”, de demócratas puros contra totalitarios a ultranza; en fin, instaurando la “grieta” que caracteriza al pueblo argentino en nuestro país, sin plantear la esencia de los temas.

Claro, tampoco es fácil –diríamos que poco menos que imposible, y menos aún en este clima de diálogo de sordos– exponer normas y su significado, así como sus resultados, –porque la LUC hace rato que está en vigencia– ante una opinión pública en general poco interesada sobre la problemática, que parece más bien un debate para darse a nivel académico-ideológico y no apelando a facilismos.
Lo que nos indica, por si alguien alguna vez tuvo alguna duda, que la dilucidación del punto en las urnas se va a dar en base a las fidelidades y afinidades partidario-ideológicas y no por análisis objetivos que aparecen ya como una utopía.