Antel tiene “asegurada” una porción del espectro que se requiere para la telefonía 5G, aseguró a EL TELEGRAFO el presidente de Antel, Gabriel Gurméndez. “La decisión nos fue comunicada a través del Ministerio de Industria, Energía y Minería (MIEM), por la Dirección Nacional de Comunicaciones”.
El MIEM “según su ministro Omar Paganini el llamado a las empresas operadoras de telecomunicaciones, entre ellas Antel, será antes de fin de año, para proceder a la subasta del espectro, más allá que nosotros tenemos ya reservado una parte del mismo”.
“Hemos ido preparando la red para el momento, pues solamente falta que se determine la fecha de la subasta”.
“Antel tiene ya sus planes y reserva su porción de espectro para que, llegado el momento, podamos salir. Son tecnologías que se van a complementar. El 5G supone la instalación de antenas y de radio bases con esas frecuencias, que permitirá una gran cantidad de conexiones y ancho de banda muy importante. Esas antenas también requieren conectarse entre sí. En muchos lugares se hará a través de fibra óptica. No hay dudas que son tecnologías que a veces compiten y a veces se complementan”.
En cuanto por dónde se comenzará a instalar el 5G, dijo que “seguramente comience a desplegarse –como ha ocurrido con las generaciones anteriores de tecnología–, básicamente en las áreas más densamente pobladas, Montevideo, las demás capitales departamentales. Un despliegue gradual que hará que las redes 4G y 5G convivan durante mucho tiempo”.
Por otra parte “gradualmente estamos apagando las tecnologías más viejas como es el 2G o GSM –fue la primera generación digital y la primera red global de comunicaciones celulares estandarizada y adoptada en casi todos los países del mundo–. Estamos en ese proceso ahora, igual que sustituyendo definitivamente el cable de cobre por la fibra óptica”.
De todas maneras, Gabriel Gurméndez no descartó que “en algunos casos se pueda utilizar el 5G como tecnología para resolver la conectividad en algunas pequeñas localidades o en algunas verticales industriales (segmento que se compone de clientes y negocios similares). Es decir, puede ser la solución en una situación de cercanía como un polo logístico o un laboratorio de tecnología digital como el que vamos a hacer con el LATU, en acuerdo con el MIEM. Pero no va a ser la modalidad usual. De hecho para esas pequeñas localidades estamos haciendo estas inversiones, conectando pequeñas localidades del Interior, en localidades rurales, con antenas o mediante la expansión de la fibra óptica”.
El alcance de las torres que se están inaugurando en centros poblados –como las cinco habilitadas la semana pasada– se basa en “potencia y altura y básicamente tratan de resolver la necesidad de los centros poblados rurales. Si se quisiera ampliar el radio, deberían usarse estructuras mucho más altas y equipos más potentes, pero si no hay suficientes usuarios no es posible”.
“Nos enfocamos en los núcleos poblados para tratar de abarcar a esas familias que allí viven, más allá de la cobertura territorial, pues Uruguay tiene áreas casi sin usuarios. De todas formas ni países desarrollados como Australia, Estados Unidos, Canadá o Sudáfrica, que tienen grandes extensiones rurales con poca densidad de población, tienen cobertura universal. Por eso empresarios internacionales como (Elon) Musk están desarrollando tecnología digital satelital (Starlink) para atender las situaciones que para la telefonía móvil resulta muy difícil. Nosotros atendemos una urgencia anterior, el rezago de iniquidad de las poblaciones rurales que no tienen señal siquiera para hablar por teléfono”.
Gurméndez explicó que “tratamos de cubrir –por ejemplo– las casi 1.200 personas que viven en Lorenzo Geyres, es como una sombrilla digital para cubrir el pueblo. A veces también se resuelven problemas de usuarios que están a varios kilómetros de distancia. No obstante, especialmente en esta área del país, Tacuarembó y la zona Este de Paysandú, hay áreas topográficas muy complejas, con baja densidad de población, con el agravante de la forestación, que también termina cercando la señal. Se hace difícil y costosa la solución. Quizás por eso en Tacuarembó y Paysandú es donde hemos instalado más radiobases en este último año”.
QUé ES LA QUINTA GENERACIÓN MÓVIL
El espectro de la telefonía celular se divide en tres bandas. La baja o “capa de cobertura” hace referencia a las frecuencias por debajo de los 1 GHz y se usa para implementar considerable cobertura tan rápido como sea posible.
Una torre celular de banda baja puede dar cobertura a cientos de millas cuadradas y ofrecer una velocidad de datos de bajada de entre 30 y 75 Mbps, ideal para usos como streaming de video en HD.
La banda media, entre 1 GHz y 6 Ghz, pueden transmitir y recibir señales de alta capacidad en áreas bastante grandes –metropolitanas– que proporcionan velocidades de descarga de alrededor de 115-223 Mbps.
La banda alta 5G (mmWave) utiliza las bandas de frecuencia de onda milimétrica. Como funciona en un radio mucho más corto, es especialmente útil en áreas urbanas y recintos concurridos como centros comerciales.
Puede proporcionar una gran cantidad de conexiones de alta velocidad simultáneamente en un área de una o dos manzanas, desde una pequeña torre celular instalada al nivel de la calle, por lo que también resultará muy útil para grandes empresas e industrias.
