La Justicia imputó a un hombre de 40 años al comprobarse su responsabilidad en al menos una rapiña perpetrada en la zona norte de la ciudad. Asimismo, fuentes confiables precisaron a EL TELEGRAFO que al mismo se le podría sumar otras causas en su contra, ya que se restan pericias para confirmar fehacientemente su participación en otros hechos similares; así como la puesta a disposición de las autoridades de otros delincuentes que vienen cometiendo parecidos delitos al norte de avenida Salto.
En base a los datos recabados por este medio, próximo a la 1.15 del pasado 11 de octubre la Policía tomó conocimiento que en las inmediaciones de Batalla de las Piedras y Treinta y Tres Orientales un joven de 21 años había sido víctima de una rapiña. De inmediato, un móvil del Grupo de Respuesta Policial se hizo presente donde los efectivos entrevistaron al joven quien dijo que se encontraba cumpliendo con su trabajo de repartidor de comidas de una empresa ubicada cerca de Plaza Artigas. El mismo contó que se había dirigido a entregar un pedido no teniendo en claro cuál era la casa a donde debía dirigirse, ya que la habían indicado que lo esperarían en la esquina. Al arribar vio a un hombre con otro repartidor y a otro muchacho que le hizo señas indicándole que se acercara unos metros y le pidió que lo acompañase a la esquina donde estaba su casa. Metros antes de llegar a la supuesta morada, el hombre –que vestía un camperón largo con insignia de Peñarol– le pidió que lo espere, ocasión en que el repartidor –tal vez notando algo raro– sacó el dinero grande de su billetera y lo escondió en su campera. Al acercarse nuevamente, el supuesto cliente extrajo de un bolsillo un arma de fuego corta y le exigió que le entregue el morral, dejando que el repartidor conservara su celular para luego darse a la fuga en dirección al barrio Purificación 3. En tanto, describió que el malviviente era de complexión delgada pero con estatura baja y cutis blanco, al cual nunca antes había visto.
De las averiguaciones logradas por los investigadores, sumado al aporte de imágenes captadas por cámaras de videovigilancia de fincas particulares y otras, se dio con la escena narrada por el denunciante aunque no se llegó a establecer la identidad de los delincuentes por encontrarse en una zona de arbustos. En tanto, en el proseguir de las actuaciones se identificó como presunto autor de la rapiña a Rolando Sebastián Fernández Rodríguez, poseedor de antecedentes penales, quien fue luego detenido por los uniformados. Sometido a la órbita penal, el Juzgado de Octavo Turno dispuso la formalización de la investigación para Rolando Sebastián Fernández Rodríguez por “un delito de rapiña especialmente agravada”, imponiéndole la pena de prisión preventiva.
