Dia Internacional del Animal: Entre maullidos y ronroneos

El 4 de octubre es el Día Internacional del Animal y EL TELEGRAFO se adelanta para compartir algunos consejos profesionales por una mejor convivencia con esos “otros” animales tan cercanos a la especie humana, porque somos responsables de su bienestar. ¡A cuidarlos, siempre!

Si bien en ocasiones son considerados indiferentes, desapegados e independientes, los gatos pueden llegar a ser muy buenos compañeros. Pasan muchas horas durmiendo en lugares minuciosamente elegidos que a veces pueden resultarnos insólitos. Se asean muy frecuentemente y les gusta tomar agua muy limpia. Observadores, de excelente olfato y poseedores de un equilibrio envidiable. “Cuando están cómodos y apegados a sus compañeros humanos, emiten un sonido que llamamos “ronroneo”, que es una señal como de agradecimiento –aunque cuando enferman también lo emiten— y les encanta jugar a perseguir cosas.

Lo que debemos saber

La veterinaria Lucrecia Olivera nos explicó qué debemos saber –sobre todo de las primeras etapas de vida— si decidimos adoptar un gatito.
“Lo primero que debo evaluar es si puedo proporcionarle un ambiente saludable para su correcto desarrollo”, dijo.
En la etapa neonatal –desde que nace hasta las 2 semanas– el gatito pasa la mayor parte del tiempo mamando y durmiendo. Se relaciona con el ambiente a través del tacto, olfato y gusto, pero sus ojitos y conductos auditivos permanecen cerrados.

En la etapa de transición –semana 2 a 3– comienza la interacción a través de la vista y el oído y es donde reconoce a los de su propia especie y se apega a la madre. Dejan de reptar y comienzan a caminar. Se inicia también en esta etapa el juego solitario y el control de la temperatura corporal.
En la etapa de socialización –semana 3 a 9— ya hay desarrollo motor y sensorial máximo. Exploran, se comunican, juegan y la madre interviene, enseñando a los gatitos a controlarse cuando muerden o arañan. Es la etapa para socializar con otras especies.

En la etapa juvenil –semana 9 hasta la pubertad– es cuando ocurre la máxima actividad exploratoria. Ya tienen equilibrio y agilidad y se vuelven independientes. Desarrollan preferencias alimentarias y cambian hacia un temperamento más solitario.
Debemos conocer el comportamiento que presenta el gato en cada una de estas etapas, para poder detectar trastornos”.
La veterinaria también explicó que los gatos son muy apegados a su territorio y por ello necesitan un espacio adecuado, con recursos para que pueda desarrollar su potencial genético como explorar, saltar y trepar, por ejemplo. Para ello necesitará juguetes, rascadores y lugares para resguardarse.

Cuándo es el mejor momento para adoptarlo

A las 8 semanas ya podemos adoptarlo y es también cuando se debe comenzar su plan de vacunación para evitar enfermedades.
“Al no ser un animal gregario, el gato desarrolla un importante apego al territorio, lo que hace destacar la importancia de proporcionarle un ambiente para su correcto desarrollo físico, mental y emocional. Además, es responsabilidad de los tutores proveerles un correcto plan sanitario para evitar el contagio de enfermedades que puede afectar su calidad de vida en forma permanente”, puntualizó la doctora.

A veces pasa que a nuestras manos llega un gatito que aún no estaba pronto para el destete, o que, por alguna razón, fue rechazado por su madre. En esos casos se puede acudir a una leche maternizada, la que deberá tomar varias veces al día y, solamente a partir de la sexta semana es cuando se añadirá la comida sólida. Ante cualquier caso, recuerden que lo fundamental es consultar siempre al médico veterinario de confianza.

Cuando el gato o gata esté por cumplir 5 meses de vida, lo conveniente es asesorarse sobre la esterilización –ya sea macho o hembra– como método de control de población y para evitar algunas enfermedades que los felinos pueden contraer si viven en la calle.