Pese a volumen de construcción, mano de obra local ocupada es sensiblemente menor a la de años atrás

Mathías Machuca.

“Hoy en el departamento no estamos ni cerca de un promedio que tuvimos años atrás” en lo que refiere a mano de obra ocupada en el sector de la construcción, según indicó a EL TELEGRAFO el presidente de la Departamental Sunca (Sindicato Unico de la Construcción y Anexos) Paysandú, Mathías Machuca, estimando que actualmente habría unos 600 trabajadores en el sector.
En Paysandú, “si bien contamos hoy con aproximadamente unas 40 obras de las cuales nosotros tenemos registro de compañeros y compañeras, que vamos todos los meses por Convenio Colectivo a realizar la asamblea de seguridad, a realizar la asamblea sindical, ahí hay dos lecturas para hacer. Si bien hay un número importante de obras en comparación a otros departamentos, la gran mayoría de estas obras son con empresas que no son locales y, por lo tanto, traen compañeros, que también son trabajadores, pero que no son del departamento”, observó el dirigente.

Precisó que “hoy en el departamento no estamos ni cerca de un promedio que tuvimos años atrás, sobre el período 2005, con inversión pública, con obras que se profundizaron cerca del 2010, cuando teníamos Alur, reformas en lo que tiene que ver con Ancap, habían silos, habían viviendas, estaba la fibra óptica, había trabajo para la Ute, para la Ose y teníamos un departamento en el que la construcción era un boom para nosotros. Pasamos de un promedio de 1.000 trabajadores en la industria de la construcción a tener más de 3.000 mil o 3.500 trabajadores”, observó.
En tanto, hoy “tendremos unos 600 trabajadores en la industria de la construcción en el departamento, contando todas las ramas no sólo la industria de la construcción de la obra civil, sino también extractiva, hormigón y peaje”, precisó.
En lo que refiere a las reivindicaciones que se defienden desde el Sunca, resaltó que “nosotros venimos de generar una condición para las compañeras del peaje, que era en base a la automatización, una lucha que llevó tiempo, horas de paros, horas de movilizaciones, reuniones con los propios ministros y las propias cámaras empresariales, y es que no tuvimos pérdida de trabajadoras” en ese sector. De manera que “generamos la reconversión laboral, generamos condiciones”, apuntó.
“Lo mismo estamos planteando para la rama extractiva, porque está claro que es infrenable la privatización que plantea el gobierno, un socio mayoritario, un privado mayoritario para el cemento portland, que eso es de caja la privatización”, consideró. En tanto en este tema “se ha hablado de los trabajadores públicos” que tendrían asegurados sus puestos de trabajo, “nadie habla de los privados, de los tercerizados, de nuestros compañeros de la extractiva. Ahí es donde primero tenemos que hincarle el diente y garantizar la fuente de trabajo”, entendió.

En su visión, hay que “garantizar primero que Ancap siga siendo estatal y público, porque eso es patrimonio de todos los uruguayos y uruguayas y donde también nosotros queremos velar. Queremos saber cuál va a ser el futuro de nuestros compañeros y compañeras de la rama extractiva. Acá en Paysandú estamos hablando de cerca de 100 puestos de trabajo, muchas de ellas jefas de hogar”.
Por otra parte, “en lo que tiene que ver con la inversión pública”, ya que “si bien es nacional, pero repercute en el departamento”, apuntó, citando a modo de ejemplo “el recorte de las 1.000 viviendas de los sorteos que se previeron en este presupuesto quinquenal, 1.000 viviendas menos por año para Fucvam, plan de viviendas sindicales, Fecovi”.
Asimismo, se refirió al “Fideicomiso, que me parece que en el departamento está olvidado, que fueron 25 millones de dólares que endeudaron al pueblo sanducero y que se viene tocando de a puchito”.

“Hay cosas que hay que sentarse a discutir”, entendió el dirigente sindical, indicando que “es parte de nuestra reivindicación, Fideicomiso, generar puestos de trabajo, defender el portland en el Uruguay, inversión pública. Eso es fundamental para todos porque también sabemos que cuando hay un puesto de construcción directamente e indirectamente generas un puesto de trabajo más, porque va a trabajar el de la barraca, el de la ferretería, el panadero de la esquina, el bolichero, hasta el compañero o la compañera que vende empanadas en la calle porque va a la obra y se le va a comprar”.
“Cuando nosotros planteamos este tipo de situaciones, que van más allá de lo salarial, más allá de las condiciones de trabajo, va en defender nuestras propias conquistas y en defender puestos que son genuinos y que la plata queda en el departamento”, observó.

LA BRIGADA SOLIDARIA  “AGUSTÍN PEDROZA”

Por otra parte, Machuca aludió a la labor que realizó la brigada solidaria “Agustín Pedroza” con los damnificados de la turbonada del 11 de julio. “Tal vez no fue suficiente lo que pudimos hacer como brigada para solucionar el techo de todas las vecinas y vecinos, ahora también entendemos que más allá de repartir materiales, no hubieron políticas de decir acá estamos como gobierno nacional, acá estamos como gobierno departamental, acá estamos como Ministerio de Vivienda para solucionar ese techo”, opinó.
“Nosotros como brigada orgullosamente podemos decir que desde el día cero, desde que pasó ese evento climático hemos estado ahí y quisimos darle un cierre simbólico y ver de qué forma se responde del otro lado con esas familias que todavía siguen sin un techo”, indicó, a la vez de referir que para esta labor “vinieron delegaciones de todos los departamentos en más de una oportunidad, que en un 85% eran desocupados”, pero que “entendieron que si bien estaban complicados había gente que estaba más complicada aún y eso hace en realidad la solidaridad de este gremio, que la lleva a la práctica”.