El subsecretario del Ministerio de Industria, Walter Verri, había asegurado un día antes del anuncio del Poder Ejecutivo que los combustibles iban a registrar “una baja importante”. El jerarca reiteró que “es una baja importante porque implica $6 en el gasoil y $3 en las naftas. En este último caso se puede afirmar que no es tanto, pero debemos pensar cuál ha sido la secuencia de la variable del combustible en estos últimos meses”. Verri señaló que “cuando hemos tenido que subir, lo mantuvimos durante dos meses consecutivos sin modificaciones, pero ya veníamos de unas bajas importantes en meses anteriores en un mundo donde los combustibles han vendido al alza desde hace mucho tiempo. Por ejemplo, en muchos países han tenido incrementos tras incrementos, no solamente en los combustibles fósiles sino también en la energía eléctrica”.
Explicó que “en Uruguay estamos anunciando que el aumento de las tarifas públicas serán la mitad de la inflación que prevemos y la de Antel aún es menor a la mitad. Son todas buenas noticias y podemos transmitir que el sistema que hemos diseñado funciona bien. La gente está confiando que cuando los combustibles tienen que bajar, van a bajar y recuerda lo que ocurría antes”.
De acuerdo al jerarca ministerial, “todos los 1º de enero los combustibles ajustaban y durante todo el año –con suerte– se los tenía que volver a subir. Y si el precio del petróleo bajaba, nosotros no nos enterábamos porque no repercutía en el surtidor. Eran contadísimas las veces que el precio del combustible bajó. Por lo tanto, es un acierto de transparencia y previsbilidad el nuevo sistema de fijación de precios de los combustibles que muchas veces fue criticado”, dijo a EL TELEGRAFO. Recordó que “inclusive, a nosotros mismos nos hacía dudar, porque aplicarlo con subas permanentes era una historia el hacer entender –pero necesaria– porque había que comprender que el mundo estaba en dificultades. El precio del petróleo subió a valores históricos y ni que hablar de los combustibles, porque la demanda de algunos productos hizo que subieran aún más que el propio petróleo”.
Precio de frontera
La diferencia cambiaria con Argentina y su presión sobre el precio de los combustibles, “siempre está sobre la mesa”. El equipo económico “resuelve sobre el Imesi que obviamente impactan en las naftas y no en el gasoil que tiene IVA. Por lo tanto, ahí no hay incentivo como hay para los otros combustibles”, puntualizó.
No obstante, Verri reconoció que “cualquier cosa que hagamos, aún llevando el descuento del Imesi al 40%, no vamos a poder absorber la diferencia con Argentina. Tendremos diferencias porque la macroeconomía es muy diferente a la nuestra y el mundo. No solamente repercute en los combustibles, sino en todos los productos y las excepciones podrían darse por controles más estrictos en la Aduana. Sé que lo están haciendo, pero es difícil poder competir con un país cuyos precios no se pueden igualar”.
