La Intendencia de Paysandú se encuentra en pleno proceso de obras para el cierre del vertedero a cielo abierto y en oportunidad de la presencia del subsecretario del Ministerio de Ambiente, Gerardo Amarilla, en junio confirmó que será “la primera” en recibir partidas para la mejora del equipamiento y nuevas herramientas.
El intendente Nicolás Olivera anunció la adquisición de maquinaria para la futura disposición final, a fin de generar lo que describió como “la clasificación en condiciones dignas”. El director de Aseo Urbano y Espacios Públicos de la Intendencia, Carlos Batista, señaló que en el vertedero se construyen nuevos espacios destinados a dicho objetivo. “El futuro cierre del vertedero está marcado por una nueva gestión de los residuos domiciliarios. En realidad, es darle un nuevo proceso a la disposición final. Allí se instala una empresa que va a trabajar de otra forma con los residuos domiciliarios y evitará la problemática social del entorno”, dijo a EL TELEGRAFO. El jerarca señaló que “el relacionamiento con los hurgadores es muy bueno. Trabajan en la búsqueda de su sustento diario y nosotros no queremos seguir arriesgando con los vehículos de nuestra dirección que ingresan a volcar. La situación del vertedero no es una novedad, sino que se registra desde hace unos 20 años”. Consultado sobre una fecha posible, adelantó que “será pronto”.
“El camión volcará en una tolva que ya se está armando en el vertedero junto con el nuevo galpón y la obra se encuentra muy avanzada. Los residuos pasan por una cinta y se hace el reciclaje. Lo que no es reciclable se encapsula, se compacta y se entierra. A nuestra dirección le da seguridad, así como a los choferes, de no tener accidentes en la noche y que no serán agraviados. Y a los recicladores, que no ocurrirán accidentes”. Agregó que “incluso soluciona la humareda, que es una problemática padecida desde hace años por los vecinos de la zona”.