MONTEVIDEO (por Santiago Balbis). La previa a las elecciones de la AUF se calentó todo lo que se podía esperar, y más. Para este mediodía está prevista la audiencia en la Justicia tras el recurso de amparo presentado por los clubes que apoyan la candidatura de Pablo Ferrari, luego de que denunciaran que las elecciones en la Primera División Amateur se realizaron a mano alzada para definir el voto hacia el presidente Ignacio Alonso, que va por la reelección.
Pero ayer se sumó un nuevo capítulo: Ferrari convocó a conferencia de prensa en el NH Columbia. El motivo no fue otro que dar a conocer que la Conmebol no le dará el certificado de idoneidad para poder ser candidato a las elecciones que, si la Justicia así lo decide al mediodía, se llevarán a cabo a las 18 horas en el Estadio Centenario. “No me bajé: me bajaron”, dijo ante los medios (entre los que se encontraba EL TELEGRAFO) el subsecretario de Deportes, que sorprendió hace poco más de un par de semanas al anunciar su candidatura. Y estuvo acompañado, ayer, por los presidentes de los clubes que lo apoyan.
Le tiró munición gruesa a Alonso (“parece que del otro lado, y apoyado por grupos de interés, quieren ganar el campeonato en los escritorios y sin rivales”), y aseguró que “17 días después de comenzada la campaña y cuando faltan horas para su término, luego que la Comisión Electoral de la AUF recibió los candidatos homologados, dio detalles del acto y hasta se había elegido el color de las papeletas para cada candidato, (…) recibí la notificación de la Conmebol, donde me proscribe diciendo que no estoy habilitado”.
¿Cuál es el motivo? “Dicen que soy empleado público, aunque estoy de licencia desde el 26 de enero pasado y tengo un cargo de particular confianza. No soy funcionario público”. Ferrari repasó que en las anteriores elecciones se permitió ser candidato a funcionarios públicos. Pero el tema es otro: Ferrari es subsecretario nacional del Deporte, más allá de que está de licencia, por lo que integra un organismo del gobierno que tiene la tarea de fiscalizar a las federaciones deportivas. Y, sabido, es FIFA no permite la injerencia de los gobiernos en el fútbol. Por lo tanto, Conmebol señaló que si quiere ser candidato, Ferrari debe renunciar a su cargo en la Secretaría.
“La afición uruguaya no vota, pero debe saber lo que está pasando, porque si mañana su equipo es perjudicado en la cancha, tiene derecho a pensar que fue por razones espurias. Lo que se generó es una crisis de confianza y honestidad en el fútbol uruguayo”, tiró.
Los dirigentes que acompañaron a Ferrari no se quedaron callados. Ignacio Ruglio, presidente de Peñarol, apuntó: “¿cómo va a renunciar a su cargo, de lo que vive su familia, si el día de mañana todos sabemos que va a perder esa elección porque la tienen ganada con los grupos de interés”, de los que dijo que “fueron creados especialmente para mantener en el poder a quien esté hoy”.
Consultado por EL TELEGRAFO mientras se retiraba del NH Columbia, Ruglio dijo que “seguramente no se irá” a las elecciones, “y es algo que vamos a hablar por estas horas”, dijo haciendo referencia a que los clubes que apoyan a Ferrari, quien adelantó que responderá la nota de Conmebol.
Ferrari y los clubes que lo apoyan mantienen la esperanza de que la Justicia aplace las elecciones, para así tener el tiempo suficiente de volver a estar en carrera. Hoy será tiempo de ver qué resuelve la Justicia. Pero todo hace pensar que a las 18 serán las elecciones. Y que Alonso será otra vez presidente.
