Todavía se espera. El ministro Javier García anunció públicamente que se iniciaría una investigación interna luego de que en 2021 fuera comprobada la existencia de hostigamientos, apremios físicos hacia los aspirantes de la Escuela Militar Aeronáutica.
Todavía no se sabe cuál es el resultado de la nueva investigación, que se sumará a la realizada en 2021, cuando se comprobó por testimonios de los involucrados los apremios físicos a los que eran sometidos los aspirantes, y así lo reflejó el informe de la investigación realizado por la Mayor (Nav.) Silvia Caravia, que se trataba de hechos practicados de manera sistemática.
Por lo pronto, el pasado mes la defensa del aspirante Ariel Cortés, que denunció haber sufrido castigo físico y abuso moral provocando en su momento la referida investigación, solicitó información al Ministerio de Defensa para conocer la resolución que dispuso llevar adelante en el ámbito de ese Ministerio la nueva investigación. Pero aún se espera conocer ese documento público.
El 23 de marzo el Ministerio de Defensa comunicó que el pedido de información pública tenía plazo primario para el 31 de marzo, pero “para su adecuado y cabal diligenciamiento” decidió prorrogar el plazo por otros 20 días hábiles a partir del día 31 del pasado mes para “resolver la solicitud de información”.
Lo que se conoce es que en 2021 la entonces Mayor (Nav.) Silvia Caravia fue designada como Oficial Investigadora para realizar, según el Decreto 500/91, “Información de Urgencia”, sobre “los presuntos actos de situación de apremio físico en el desarrollo del curso Básico de Formación Militar de la Escuela Militar de Aeronáutica”, según reza su informe de aquel momento.
En 2021 Caravia era Comandante del Escuadrón de Base Aérea de la Escuela Militar de Aeronáutica y al año siguiente pasó a ser Jefa de Cuerpo de Alumnos. En el informe de 2021, al que tuvo acceso EL TELEGRAFO, Caravia confirmó que existieron castigos físicos y humillaciones hacia los aspirantes.
“La suscrita considera necesario, dado el desconocimiento de las faltas aquí presentadas, realizar charlas de concientización, conferencias, capacitaciones sobre el tema castigo físico y la obligación de informar sobre las irregularidades”, analizó.
En su informe dejó constancia de acuerdo al Decreto 55/94 dice, en el artículo 10, que “…son contrarios a la disciplina militar y deberá ser severamente sancionado todo rigor innecesario o castigo no previsto reglamentariamente o desproporcionado con la falta, todo castigo impuesto por sentimientos ajenos al deber y todo gesto o acto que lesiona la dignidad del sancionado”. Y a lo largo de su tarea de investigadora informó que hubo “situaciones de presuntos delitos, faltas gravísimas y graves”. Solicitó al director de la Escuela dar intervención a la comisión para atención a situaciones de acoso laboral y/o sexual para personal integrante de la Fuerza Aérea Uruguaya, pero el director expresó que “dar pase a la comisión antes mencionada sólo sumaría tarea administrativa y pérdida de tiempo”. Luego, en un memorando del director, Cnel. (Av) Walter Pérez, al Comandante del Comando Aéreo de Personal Brig. Gral. (Av) José Medina, con asunto “información de urgencia dispuesta por O/CAP Nº10/21”, se establece que “se pudo determinar que las situaciones de apremio físico vienen ocurriendo desde hace muchos años, por lo cual tanto los Oficiales más jóvenes como los propios Cadetes lo han naturalizado”. Pérez, responsable de la Escuela durante la sucesión de hechos admitidos, fue designado el pasado 18 de enero en misión diplomática como Agregado Aéreo y Adjunto de Defensa a la Embajada de Uruguay en los Estados Unidos, a partir del próximo 3 de mayo.