El edil del Frente Amplio, Andrés Imperial, denunció el “abandono total” de las termas de Guaviyú, la creación de un basurero por la Intendencia frente a la ruta 3 y manifestó su “sorpresa por las declaraciones del director de Turismo, de una ocupación de 90% en las vacaciones de invierno, cuando los operadores nos dijeron que fue en torno al 10%”.
Luego de recibir “el llamado de vecinos y algunos operadores turísticos, el miércoles nos fuimos hasta las termas a comprobar con nuestros propios ojos lo que nos contaban por teléfono. La sorpresa fue mayor cuando lo que vimos y escuchamos de los residentes superaba lo que por teléfono nos podíamos imaginar. El abandono total de parte de la Intendencia de nuestras queridas termas de Guaviyú”.
El edil señaló que “como muestran las fotos, así lucen nuestras termas. No es un antiguo alambrado de piedra. Es que se cayó el alambrado que da a la ruta y la Intendencia no tuvo mejor idea que ir y volcar seis o siete viajes de escombro para delinear”.
Explicó que lo que recoge el camión recolector “de ramas, podas, hojas y juntada de escombros va y se tira ahí en el frente como un gran basurero. Hay plástico, botellas, nailon y las propias sillas de PVC con el sello a fuego de la IDP tiradas ahí, contaminando el medio ambiente”. Según el edil, “los lugareños que apostaron a llevar una vida tranquila y en convivencia con la naturaleza y el medio ambiente ya no aguantan más esta situación. Los operadores turísticos pequeños, medianos y grandes en su mayoría están al borde de fundirse como empresa, ya que en plenas vacaciones de invierno tuvieron casi una ocupación cero”.
Imperial señaló que “son muchas las causas. La diferencia cambiaria con Argentina, la pérdida de poder adquisitivo en los trabajadores uruguayos por tercer año consecutivo. Pero lo que los lugareños más reclaman y denuncian es lo que corresponde a la Intendencia Municipal de Paysandú, al intendente Olivera y a su director de turismo”.
Imperial resaltó “los precios de la entrada, que pasó a costar 200 pesos por persona. La caída del convenio para los trabajadores municipales –que es histórico– con el 50 % de descuento en los alojamientos municipales. Todo eso conspira para la nula llegada de turistas a Guaviyú”.
OCUPACIÓN TERMAL
“Nos sorprendió que el director de Turismo diga que hubo una ocupación de 90%. Nosotros hablamos con vecinos residentes en las termas y operadores turísticos que tienen otras preocupaciones aparte de quienes van a pasear. Probablemente involucró también a termas de Almirón, pero esa cifra es totalmente falsa. Cualquiera sabe que no es cierto porque todos vimos las colas en los puentes y eran para cruzar hacia el lado argentino, a diferencia de otras épocas, cuando los argentinos venían a nuestras termas”, dijo a EL TELEGRAFO.
Reconoció que “los operadores tenían esperanza en un repunte durante las vacaciones, pero nos llamaron para manifestar sobre la poca –prácticamente nula– concurrencia a Guaviyú.
El edil aseguró que “es verdad que no podemos cambiar esa realidad y evitar que la gente se vaya a vacacionar a otro lado, pero si motivamos al visitante y que sea accesible, algunos más pueden venir. Ahora vas a termas de Guaviyú y te encontrás con un basurero a cielo abierto, hecho por la propia Intendencia con restos de recolección, desechos de obras y el muro que delimita las termas con la ruta 3, con escombros que tiraron, como si fuera un muro de piedra. Es vergonzoso”.
COSTOS DE INGRESO
“El costo para ingresar a las termas de Guaviyú es de 200 pesos por persona. Una familia con cinco integrantes –tomando en cuenta los mayores de 10 años– tiene que pagar 1.000 pesos simplemente para entrar a pasar la tarde”, agregó.
En cuanto “al alojamiento, cuesta 4.000 pesos por noche. Si fueran cuatro personas, es decir pareja y dos hijos son 3.500 pesos por noche. Los comerciantes nos dicen que en invierno iban los municipales porque tenían un 50% de descuento que cayó, luego del convenio con UTU. Tampoco los escuché quejarse a los funcionarios municipales que ya no tienen ese beneficio, pero era muy interesante”.
LA PISCINA
“La piscina está linda y tiene un entorno agradable de vestuario con baño nuevo. Pero es una piscina para enero, porque cuando fui el agua estaba apenas templada. Es imposible con las bajas temperatura que hubo que alguien se haya metido allí. Los comerciantes nos decían que algunas personas iban, tocaban el agua pero no ingresaban. Además está ubicada en un lugar que quedó alta y separada de las demás. Con el viento, es imposible que alguien se bañe”, dijo Imperial.
Explicó que “esa obra debió tener un estudio previo para saber que –cuando se amplía el caudal–, el agua se va a enfriar. Ahora hablan de invertir cerca de medio millón de dólares para comprar una bomba y calentar el agua”.
