Fotógrafo Marcelo Cattani y su exposición en Lima, Perú

“Uruguay: un pequeño gran país” lleva por título la exposición que permanecerá hasta el 27 de agosto en Lima.

Hasta el 27 de agosto se extiende en el Museo Metropolitano de la ciudad de Lima, Perú una muestra de fotografías del salteño Marcelo Cattani –quien hace unos años también trabajó para rurales de EL TELEGRAFO–, que lleva por título “Uruguay: un pequeño gran país”. La exposición, compuesta por 30 piezas, cuenta con el apoyo de la Embajada uruguaya en Perú y el Ministerio de Relaciones Exteriores y contó en su inauguración con la presencia del embajador, profesor Luis Hierro López.
El artista relató que esta posibilidad se gestó a partir de un viaje a la capital incaica junto a su pareja. “Había publicado hacía unos días el libro El Ojo del Alma, ella, que es antropóloga, fue a dar una charla; tuvimos una visita a la embajada y le regalé el libro al embajador Hierro López y le hablé un poco de la idea de hacer una exposición. Presentamos un proyecto a un llamado de la cancillería, fue aprobado, y eso significó que nos costearan la posibilidad de estar exponiendo nuestro trabajo en Lima”, dijo Cattani a EL TELEGRAFO. Agregó que tenía mucha expectativa por poder mostrar su trabajo, “que en definitiva todos los que hacemos una actividad artística lo hacemos como forma de compartir con los demás. Pero superó nuestras expectativas. Lima en definitiva, es una ciudad con una historia cultural impresionante. Estamos hablando que en Lima son once millones de personas las que conviven, el tema turístico, el tema cultural”.

MOSTRAR

Cattani también destacó el lugar que ocupa hoy la fotografía peruana, “que es lo que a mí me toca, que conozco bastante del tema. La fotografía de Perú, es de altísimo nivel, hay muchos peruanos exponiendo en Europa, sobre todo fotografía artística y muchas galerías de arte en distintos lugares”. Señaló que hay “barrios como San Isidro; hay un barrio que tiene mucha movida de galerías que es Barranco, en Lima, y de muchas de esas galerías después de ver la muestra nos invitaron a exponer allá, y la prensa hizo una muy buena crítica de esto”.
Acerca de la exposición “Uruguay, un pequeño gran país”, el artista señaló que procuró “de alguna forma, a través del arte, a través de sus personajes, de sus paisajes, de sus costumbres, mostrar nuestro país”. En este sentido describió que “hay algunas fotos que de alguna forma la gente las conoce, como la del caballo y el paisano tomando agua, que es una foto bastante icónica del Uruguay. Habla de un Uruguay país natural, que en cualquier lugar del país podemos tirarnos y tomar agua, que en estos momentos con esto de la crisis del agua un poco desvirtuaba esa problemática”.

VOLVER

Para Cattani fue una feliz experiencia y quedaron abiertas muchas puertas para poder exponer en galerías de Lima. “Hay algunas invitaciones para llevar el año que viene la muestra a otros lugares, lo cual definitivamente nos tiene un poco abrumados por lo que fue la respuesta”. También aseguró que todo esto es en alguna medida fruto de la insistencia. “Yo creo que un poco a los sueños hay que trabajarlos, el mismo embajador, cuando estuvimos en su casa allí en Lima, nos decía que este tipo de fotos deberíamos exponerlas en otro tipo de lugares, que la mejor forma de mostrar Uruguay es a través del arte”. Una de las posibilidades es realizar una exposición en China, también a través del cuerpo diplomático, “es una opción. Como que en el 2024 ya tenemos una proyección de que esta exposición, complementada, la podamos estar llevando a otros lugares. Eso nos tiene motivados, bien contentos”, dijo.

TRAYECTORIA

No es la primera vez que el trabajo de Cattani se puede apreciar en el extranjero. “Por suerte estuve exponiendo en Nueva York, en Washington, en la embajada de Uruguay en 2010, después fui invitado y fui con visa cultural, estuve también en La Habana, veinte días haciendo todo un trabajo, que también hay una invitación para volver a hacerlo en la Casa del Alba”, indicó.
Claro que para que se abran todas estas puertas es necesario golpear varias más, y eso forma parte del trabajo. “Cuando yo empecé en fotografía, muy joven, con 14 años, un estanciero al cual iba a hacerle la foto del caballo me dice un día: ‘mire mi joven amigo, en esto es un poquito de talento y mucho de sudor’”.
“Es lo que yo he predicado. Esa frase me quedó como grabada a fuego para toda mi vida”. Agregó que “los sueños no llegan a la puerta y te golpean y te dicen ‘vengo a cumplirme’. No hay un hada madrina que te transforme las cosas en realidad; creo que es mérito al trabajo, a la tenacidad”. Más allá de esto también debe haber un valor intrínseco en la obra, dijo. “El arte yo creo que tiene que ser conmovedor, movilizarte, que te digan qué lindo, qué feo, pero que lo peor que te puede pasar es que no te digan nada. Creo que eso es parte de mi obra”.