El último Congreso Nacional de Intendentes recibió a autoridades del Ministerio de Ganadería (MGAP) y del Instituto Nacional de Bienestar Animal, donde anunciaron la creación de las delegaciones departamentales del INBA a partir de 2024, con el cometido de coordinar con las autoridades nacionales.
Estarán encabezadas por los directores departamentales del MGAP, quienes serán articuladores interinstitucionales a fin de atender la demanda social de la sobrepoblación canina y de los equinos sueltos en la vía pública. En Paysandú existen dificultades para obtener un predio con las condiciones mínimas destinado a los animales sueltos, en cumplimiento con el decreto presidencial 233/2022.
COMPLEJO
“Tenemos un problema a nivel interinstitucional. No contamos con un campo para alojar a los caballos de forma transitoria. Teníamos un campo que era del Ministerio del Interior, pero se vendió y nos piden el desalojo. Hace aproximadamente tres meses que tratamos de conseguir –con diferentes instituciones– un campo para solucionar esa situación. Hemos hablado con UTE, con el ministerio de Transporte y Obras Públicas y con Colonización. Están en diferentes trámites. Obviamente que eso demora y a nosotros nos tiene muy preocupados esta situación”, dijo el director departamental del MGAP de Paysandú, Tec. Agr. Carlos Oyanarte, a EL TELEGRAFO.
Reconoció que “es compleja, asfixiante, con muchas presiones por parte de la población y de las autoridades municipales y, obviamente, nos vemos comprometidos en dar cumplimiento al decreto 233. Ha sido difícil poder dar soluciones. Pero queremos pedir a los tenedores de caballos que sean conscientes de la situación. Que nos den una mano, vigilando los caballos, controlándonos para que no estén sueltos en la vía pública. Especialmente en la noche porque es de gran riesgo, hay lugares que son oscuros y es complicada la visibilidad de un caballo que tiene la particularidad que se encandila fácilmente y ocurren los accidentes”.
Oyanarte definió que “el relacionamiento con todas las instituciones ha sido de mucha presión y hasta ahora no se ha podido encontrar una solución. Hemos visto predios, pero no están en condiciones. O no tienen agua, o no están alambrados. Y en muchos departamentos está pasando lo mismo. Tal vez no tengan la población de caballos que tenemos nosotros porque Paysandú tiene una gran población de equinos. Y ordenar esta situación es complejo”.
COMPROMISOS
En la última coordinación de directores departamentales del MGAP, en Arequita, del 28 al 30 de junio pasado “quedamos con los directivos del INBA en buscar una solución a nivel departamental. Pero, obviamente, toda esa coordinación debía ser generada a través del Congreso Nacional de Intendentes. Son ellos, en realidad, quienes deben comprometerse con el directorio del INBA para dar cumplimiento al decreto y la ley en sí”, agregó. Según Oyanarte, “la creación de los comités departamentales del INBA estarán constituidos de acuerdo a la ley. Hay que ponerlos en funcionamiento, pero tiene que haber un compromiso por parte de los municipios y las instituciones que van a integrarlo. Son el Ministerio del Interior, las intendencias, representantes de organizaciones sociales como las protectoras, así como el Ministerio de Ganadería”, encabezadas por los directores departamentales del MGAP.
Explicó que “una vez constituido ese comité, tendrá un protocolo que deberá ser lineal para que funcionen las instituciones de forma adecuada. Seguramente se podrán encontrar los caminos para solucionar los problemas que tenemos, como los perros sueltos en la vía pública así como otras situaciones de vecindad que se provocan por esta problemática. Ahí llegarán las denuncias para actuar en consecuencia. Pero, en realidad, hasta que eso no esté aceitado es imposible funcionar. Hoy el problema que aqueja es poder dar cumplimiento al decreto 233”.
ACUERDOS
Oyanarte reiteró que “debe existir un acuerdo interinstitucional porque no es un tema únicamente del ministerio de Ganadería. El decreto 233 establece claramente la colaboración de la Intendencia, las acciones primarias a cargo del ministerio del Interior y 72 horas después actúan los Servicios Ganaderos del MGAP. Es allí donde se les pasa la responsabilidad a Ganadería y lo dice claramente el decreto. Es una acción en conjunto con la actuación de varias instituciones. Por lo tanto, creo yo que es una responsabilidad compartida”. Abogó para que “en las próximas semanas tengamos respuestas a los planteos realizados con un campo definitivo para alojar a estos animales en forma transitoria. Y, a partir de allí, abrir un expediente para que vuelva con la resolución de la venta”.
