Sabores Caseros: el gusto por el sabor familiar y hogareño

Marina Masalles, Francisca Borges, Rosario Ávalos y Teresita Coello.
Marina Masalles, Francisca Borges, Rosario Ávalos y Teresita Coello.

Con 20 años en actividad, el grupo Saberos Caseros de pueblo Esperanza se presenta en esta semana con su habitual oferta tanto de dulces envasados o al almíbar, mermeladas y productos en aceite, como de desayunos, almuerzos y meriendas.

Ubicado a escasos metros de ruta 90, en el kilómetro 15, y en una casa centenaria rodeada de verde y otras chacras, el emprendimiento artesanal lo llevan adelante Teresita Coello, Francisca Borges, Marina Masalles y Rosario Ábalos. Hasta el domingo, el local estará abierto en el horario de 9 a 16.30.

“Nos dedicamos a esto hace bastante”, subrayó Teresita a EL TELEGRAFO. Entre las mermeladas cuentan con más de 25 sabores; a su vez, ofrecen pickles, morrón en aceite de vinagre, pepinillo, hortalizas para aderezo; en almíbar tienen peras a la menta, zapallo, higos, boniatos, quinotos; también hay dulce de leche.
“Todo casero y sin conservantes”, remarcó. “Con la duración, a partir de su fecha de elaboración, de un año a temperatura ambiente, porque están envasados al vacío. Al abrir, claro, tenés que llevar el frasco a heladera”, agregó Teresita.

A la vieja usanza, utilizan un horno a leña para hacer todo de forma casera, incluso el pan. “El fuego se usa siempre y para la elaboración de mermelada” y le da su propio toque, “le cambia el sabor”. “Es como con los sabores de las abuelas que siempre hacían todo con fuego a leña. Porque no había otro”, dijo, de su lado, Rosario. “Nosotras implementamos esto cuando se resolvió formar el equipo; el fuego tenía que ser con cocina a leña”, acotó.

“El pan casero que se sirve en los almuerzos, meriendas o desayunos, siempre es casero, hecho en esa cocina. Es muy valorado este pan casero, y muy buscado también. Porque lo encargan, inclusive con anterioridad. Cuando vienen para la merienda ya se llevan el pan”, terció Teresita.

Además del espacio de ventas, el local presenta en una galería con forma de ele un espacio con libros a la venta de la Biblioteca Comunitaria que funciona en una habitación contigua –y es muy visitada por los niños de la escuela–, y una mesa con productos para degustar. En el fondo, y pasando el aljibe, se encuentra un lugar lleno de tranquilidad y paz para los desayunos, almuerzos y meriendas.

El menú para los almuerzos ha sido de matambre arrollado y tallarines caseros con salsa boloñesa o de tomate, en tanto las meriendas constan de diez sabores de mermelada, té, café, leche, escones, pan casero, budín inglés y una torta dulce, jugo de fruta, y aguas saborizadas.

En este servicio, Sabores Caseros se adapta a la cantidad de comensales que lo requieran. “No importa el número. Siempre armamos para las personas que pidan, dos, cinco, diez. Hemos tenido hasta grupos de 50 y nos han traído excursiones”, explicó Teresita.

Con reserva

Para desayunar, merendar o almorzar, “siempre hay que reservar”, y se hace llamando al teléfono 098 343 891. “Como todo es artesanal, todo hay que elaborarlo con anticipación. Lo más prudente es hacer la reserva por lo menos un día anterior”, dejó en claro Teresita.