Alrededor de las 3.30 de la madrugada de ayer, cuando la familia Wittman (matrimonio y un hijo) dormía en su casa de Solano García 361, casi Almagro, se inició un incendio en la cocina de la casa –probablemente por un corto circuito en la llave diferencial– que se propagó al cielorraso con elementos tan inflamables como lana de vidrio, y ya no pudo ser contenido.
El primero en despertar fue el hombre, quien alertó a su esposa y rápidamente ambos fueron a despertar al hijo de 23 años. Mientras, las llamas crecían rápidamente tanto hacia el exterior como hacia el interior. Afuera tomaron fuego una camioneta Peugeot y una moto, en tanto otro auto pudo ser movido antes que el incendio también lo consumiera.
Y hacia adentro siguió destruyendo todas las habitaciones, los muebles, la ropa. Una casa de ladrillos, construida hace 38 años destruida en un noventa por ciento, incluyendo puertas y ventanas.
Un familiar sostuvo que “hubo una demora importante de Bomberos” y cuando pudieron iniciar el combate de las llamas, la casa no podía ser salvada. Estuvieron trabajando hasta las 6 horas, tras lo cual la familia recorrió desolada lo que había quedado de su hogar.
Llamaron a la Intendencia y al Mides y “lograron una rápida respuesta, muy buena”. Temporalmente ocuparán una casa cercana, que está desocupada. Y comenzarán a reconstruir su destruida vivienda. No sufrieron problemas físicos, excepto la mujer que tuvo que ser atendida por inhalación de humo, pero fue dada de alta sin internación.
