“Este puerto no puede darse el lujo de la miseria con infraestructura sin aprovechar”

Una delegación del MPP encabezada por el senador Charles Carrera visitó el puerto de Paysandú, donde fue recibido por un grupo encabezado por el capitán del puerto, Marcelo Tortorella.

Un senador y dos diputados del MPP –entre ellos la sanducera Cecilia Bottino– recorrieron el puerto de Paysandú y determinaron que “la visita dejó al desnudo una triste realidad de una infraestructura paralizada, donde la inversión realizada cercana a los 12 millones de dólares, durante la gestión frenteamplista, que fue reinaugurada con bombos y platillos por la actual administración en el 2020, con la presencia del presidente Luis Lacalle Pou, en plena campaña política por la Intendencia, sigue subutilizada”, según el senador Charles Carrera, integrante de esa delegación.

Junto a Carrera visitaron el puerto sanducero el diputado Nicolás Viera y la diputada Cecilia Bottino junto a ediles del MPP; representantes de Cipup (Comisión Intersectorial pro Puerto Ultramar de Paysandú) incluyendo a su presidente Jorge Dighiero; y representantes del Pit Cnt y Supra, entre otros. El grupo fue recibido por una delegación local de la ANP encabezada por el capitán de Puerto, Marcelo Tortorella.

Recordó Carrera que tras años de tener un río no navegable en áreas de Paysandú, “el Paso Almirón, al sur de Paysandú, tenía escasos 80 centímetros de profundidad”, lo que hacía necesario el dragado para garantizar el tránsito fluvial. “Sin embargo, tras los primeros dragados y dada la naturaleza de los suelos, con las primeras crecientes se volvían a colmar los canales, haciendo imposible la navegación. Recién en 2016 se licitó y adjudicó el Canal Casa Blanca, paralelo al Paso Almirón, (recto y autolimpiante de suelos semiduros), que dio sustentabilidad al proyecto de navegación del río. Las obras tuvieron una inversión cercana a los 12 millones de dólares; refuerzo de muelles, pavimento de grandes superficies de explanadas, grúa para elevar contenedores, red eléctrica para garantizar la cadena de frío a los buques e iluminación nocturna”.

Esas inversiones permitieron “en el 2018 en Paysandú movilizar cargas por 250.728 toneladas, alrededor de 8.500 camiones por año, con cargas de madera serrada, arroz, citrus, carne, miel, más toda la producción granelera de una zona ampliamente sembrada y cuyas cosechas tenían un punto de salida cercano para su despacho”.

La realidad actual es diferente, en la medida que “según las propias autoridades de la ANP, en el año 2023 se movilizaron 30.000 toneladas en el puerto de Paysandú, una cifra que dista mucho de las 250.000 toneladas que movió en el 2018”.

El senador Charles Carrera remarcó que “el puerto de Paysandú necesita urgentemente ser atendido como parte de la estrategia comercial que merece no solamente la sociedad sanducera sino el país entero, que no puede darse el lujo de la miseria con infraestructura sin aprovechar como ésta. El puerto sanducero es un punto de salida estratégico para los productos nacionales que deben aprovechar los bajos costos del transporte fluvial al tiempo de reducir el impacto del tránsito de camiones por las rutas nacionales. El precio del flete es uno de los ítems principales que hacen al costo de la producción nacional, y el transporte por el río Uruguay es una vía rápida, segura y mucho más barata que los uruguayos no podemos darnos el lujo de desaprovechar. Mucho menos cuando todos los uruguayos invertimos muchos millones de dólares en infraestructura de primer nivel para ello”.

Asimismo Carrera hizo hincapié en que “cuando llegó el segundo barco portacontenedores al puerto de Paysandú (el primero fue abandonado por sus propietarios, una empresa fundada por el hoy senador Sartori, tras fondear varios años en el puerto de Montevideo), se realizó un acto con la presencia del presidente, Luis Lacalle Pou. En la oportunidad, quien era candidato a la intendencia sanducera, Nicolás Olivera, manifestó en rueda de prensa que ‘de ahora en adelante, hay un antes y un después para nuestro puerto’. Aquella expresión terminó siendo un verdadero ‘sincericidio’, pues el archivo es irrebatible en razón de las obras de infraestructura y modernización que tuvo el puerto durante los 15 años de gestión frenteamplista, y la desidia y nada de apego que tiene la actual administración en el manejo de la política portuaria nacional”.