“Sentíamos la necesidad de venir a esta, la que continúa siendo mi casa, desde que supe ser edil, una de las épocas más ricas, de más entusiasmo en mi vida. Además, quiero decir como ciudadano que esta caja de resonancia ha elevado el nivel de discusión; son otros los vientos que soplan desde las distintas bancadas”, dijo el intendente departamental Nicolás Olivera al iniciar en el plenario de la Junta Departamental la presentación de su informe 100 Días de Gestión, donde estuvo acompañado por el secretario general, Fermín Farinha.
“No vengo a hacer revisionismo”, dijo luego, pero advirtió que “alguna mención del punto de arranque tenemos que hacer, dar la cara ante nuestros errores y quizás algunos aciertos. De eso serán ustedes y la gente quien nos justiprecie”.
“La situación financiera siempre condiciona. Si bien ha habido distintas interpretaciones, los números no mienten. Mienten a veces quienes hacen los números”, indicó antes de pasar a explicar cómo recibió la Intendencia de Paysandú el 26 de noviembre de 2020.
“Las cuentas que administra la intendencia –hay otras extrapresupuestales que no le son propias– tenían ese día en depósito 72.825.820 pesos. A los pocos días teníamos que pagar salarios, pero nos encontramos que de ese dinero 12.544.808 pesos no eran de la intendencia sino fondos extrapresupuestales del Ministerio de Vivienda. Al momento de pagar los sueldos, faltaban 37.453 pesos. Técnicamente puedo decir que no recibimos dinero para pagar los sueldos”, explicó. Días después necesitó 26 millones de pesos para el pago de aportes.
“Sabía que llegaba con un escenario poco alentador, pero no pensábamos que pudiera ser tan grave. A esto se sumó la alta morosidad, edificios municipales en algunos casos en estado crítico, servicios básicos comprometidos en el medio de una emergencia vial que nadie desconoce, con un profundo y avanzado deterioro en caminería urbana y rural”, agregó.
Aseguró que se vio obligado a “tomar decisiones poco simpáticas y a la vez en épocas sensibles. La decisión de la administración de los 8 CAIF y el Centro Siempre. De hecho, la propia Administración saliente había comunicado al INAU que era inviable disponer todos los años de cerca de 20 millones de pesos para algo que en el resto del país se lograba con menos recursos”.
“Hicimos una licitación para una relación distinta en recursos humanos, pero respetando sus derechos, incluso respetando la antigüedad en la intendencia. Tomamos medidas de contención de otros gastos de recursos humanos, asociados horas extras, inhábiles, extensiones horarias y diferencias de sueldos”.
EL ERROR DE LA CONTRATACIÓN DE ESCOBAR
Luego reconoció que la situación generada con la contratación de Sergio Escobar fue un error. “La contratación a través de la oenegé de un ex privado de libertad, legítimamente sensibilizó a mucha gente. Lo hicimos guiados por la intención de reinserción. Pero luego, escuchando otras voces, entre ellas las del propio comisionado parlamentario penitenciario Juan Manuel Petit, debo decir que seguramente cometimos un error en el proceso realizado. Por eso queremos buscar establecer otros métodos para esta reinserción, por ejemplo a través del diálogo con distintas organizaciones sociales que hemos iniciado en las últimas horas”.
Situación crítica en servicios
En el Departamento de Servicios “encontramos camiones de recolección en estado crítico, una sola barométrica funcionando y 400 pozos negros desbordados y con un atraso en su atención de más de 100 días. Hoy tenemos una demora de aproximadamente 48 horas; se compró un camión barométrico”, explicó antes de anunciar que “esta semana se publica un llamado para al menos 300 volquetas, fundamentalmente dirigido a que sean fabricadas en Uruguay y particularmente en Paysandú”.
“PEDAZOS DE HERRAMIENTAS”
“La Dirección de Vialidad tenía al asumir el 44% de los equipos con desperfectos o sin funcionar. Solamente el 41% funcionaba. A eso se sumaba que el funcionario municipal no tenía protagonismo porque no participaba en las obras viales, sino que estas eran realizadas de otra manera. Hoy es diferente, el 73% de la maquinaria está en buenas condiciones y solamente el 19% tiene desperfectos. En estos 100 días, con funcionarios municipales, con aquellos pedazos de herramientas, vamos haciendo 113 cuadras, 30 con carpeta asfáltica y 82 con bitumen. Un promedio de dos o tres cuadras por día. Y además 1.486 metros de cordón cuneta”.
Ahora van a hoteles
Sin rehuir prácticamente ningún tema, Nicolás Olivera se refirió también al Hogar de Acogida que antes estuvo en la Casa del Intendente, actualmente con otro uso. “La situación del Hogar de Acogida había dejado de funcionar allí antes de que terminara la anterior Administración. Eso porque se entendió que había otra alternativa mejor, y en la cual seguimos adelante hasta que encontremos una mejor. Lo que se hace es contratar hoteles para alojar mujeres comprometidas con la violencia”.
Zona azul para paysandú
“Prometimos cambiar la Zona Azul y la Junta Departamental aprobó un proyecto que nos faculta a modificarla, lo que hicimos. Ahora realizamos un llamado para la adquisición de nuevas herramientas de gestión, donde la intendencia se va a animar a gestionar la Zona Azul, para que el dinero quede en Paysandú. Una Zona Azul que esté al servicio del centro y las demandas modernas y no un servicio de recaudación que no quede en Paysandú”.
LOS MUNICIPIOS
En lo referente a los municipios “es sabido que con seis municipios tenemos un excelente relacionamiento –y me refiero a sus Concejos Municipales– y con uno hemos tenido una dificultad, que estimo y confío que este cuerpo pueda interceder dentro de poco para que se resuelvan estos inconvenientes. Con esos seis municipios, por ejemplo, hemos logrado acordar un trabajo conjunto entre los municipios y el Departamento de Obras para trabajos de caminería imprescindibles. En el interior también devolvimos la gestión de Termas de Almirón al Municipio de Guichón.
NUEVO ACUERDO CON ANCAP
En el caso de combustibles, lubricantes y similares, “nos encontramos que Ancap cobraba por cada vehículo 10 dólares por el sistema de control vehicular (Sisconve), que es muy bueno. Pero decidimos ir a negociar con Ancap. Nos dijeron que en realidad los 10 dólares estaban perimidos y que ahora eran 30 dólares. Por eso pensamos en la posibilidad de un llamado público para conocer cuáles eran las condiciones de otras empresas”.
Anunció entonces que “Ancap ha aprobado que no solo no vamos a pagar 30 dólares, directamente no vamos a pagar por el sistema de control vehicular. Pero además, por primera vez una intendencia del país accederá a descuentos en combustible, lubricantes y asfalto que en el quinquenio representarán 40 millones de pesos. Pero además la intendencia no tendrá que llevarle el combustible a los municipios, sino que estos podrán cargarlo en las propias estaciones de servicio Ancap”.
“Encontramos además –siguió diciendo– 18 vehículos por los que pagábamos seguro pero estaban en un estado irrecuperable. Y ni siquiera se negoció por la cantidad de vehículos con que cuenta la intendencia. Nosotros lo hicimos y en el quinquenio ahorraremos 11 millones de pesos. En otro orden establecimos una central de monitoreo y control de la flota y en apenas 3 meses se redujo un 8% el gasto de combustible con respecto al mismo mes del año anterior”.
EL TRABAJO EN OTRAS ÁREAS
En Promoción Social “encontramos un gran deterioro en las instalaciones que ya ha sido revertido; se trabajó en el verano en seis faroles comunitarios junto a Secretaría de Juventud”. En la Dirección de Cultura “encontramos que había elencos municipales que no estaban completos, como el Coro Polifónico y Grupo Fusión, pues algunos de sus integrantes se habían jubilado. También se dispuso de un aporte económico a los grupos de carnaval y los artistas locales tuvieron la posibilidad de utilizar las salas de la intendencia sin costo. Estamos además a las puertas del Festival de Teatro La Heroica, y el festival Nuestra Canción que buscará detectar talentos sanduceros en la composición y el canto. En materia de eventos, se realizaron 36 actividades con más de 4.000 espectadores. Y logramos recomponer la relación con la Fundación Amigos del Teatro Florencio Sánchez”.
“En Turismo, después de 117 años sin que nadie pudiera entrar al Castillo Morató ahora se puede. Algunos pueden decir que es caro ir, pero se genera trabajo en la zona de Morató y Guichón. Un lugar digno de ser visitado. Adonde voy me preguntan por el Castillo Morató. Tuvimos una exitosa temporada de playas, incorporando nuevos servicios. En los juegos acuáticos, el 20% de quienes lo disfrutaron, no eran de Paysandú. Con MinTur y la Intendencia de Salto establecimos una gobernanza de lo que es el Destino Termas. El Bureau Paysandú realizó un muy buen proyecto con participación pública y privada y fuimos noticia nacional con la novedosa Cata de Tomates. Hemos además iniciado una auditoría para dirimir definitivamente la situación de la embarcación con la cual nos encontramos que no había navegado aún. Hoy distintos peritos están interviniendo y esperamos tener un informe completo y definitivo”.