El destacamento de Bomberos de Paysandú está preparado para actuar en cualquier caso en que sus servicios sean reclamados por los vecinos, y están particularmente atentos en estas fechas por las altas temperaturas que se registran, descargas y cortocircuitos eléctricos por la mayor demanda, quema de malezas o ramas (que está prohibido) así como específicamente el uso de pirotecnia en las fiestas de fin de año.
El jefe del destacamento sanducero, en este caso un sanducero, el oficial principal Miguel Fua, dijo a EL TELEGRAFO que esos casos “pasan mucho, y en verano hay problemas con la conexión de muchos equipos eléctricos en la red domiciliaria, con instalaciones viejas o que no tienen mantenimiento y las sobrecargan, y a veces no soportan la demanda porque se enchufan ventiladores, equipos de aire acondicionado, las heladeras que exigen más”.
Afirmó que “lamentablemente hemos tenido varias salidas estos días con incendios en viviendas, con el caso más grave del pasado domingo con el fallecimiento de dos personas, que tuvo repercusiones en la ciudadanía”. Preguntado sobre el protocolo de acción para los casos de incendios en viviendas, y específicamente en el caso de la vivienda de avenida Roldán, Fua dijo que “nosotros estamos siempre con personal en la base, con guardias de cuatro efectivos las 24 horas, y en caso de ser necesario se cita a las personas que están de franco si se necesita apoyo”.
La guardia de la base en calle Treinta y Tres Orientales “está fija, esperando el llamado y cuando sucede se sale al minuto de recibir la comunicación, y el tiempo de llegada al lugar depende de la distancia y del movimiento que haya en el tránsito”.
Fueron seis minutos para llegar
Luego se refirió “específicamente en el caso de Estefanell y Roldán estábamos acá, no habíamos tenido ninguna salida, se recibió el llamado por el 911 y se demoró seis minutos en llegar al lugar, incluyendo el minuto que el personal tiene para equiparse antes de salir. Se concurrió con la bomba 1 (como se denominan los camiones cisterna) y si hubiera habido necesidad –que eso lo evalúa quien está a cargo de la dotación– de mayor cantidad de agua, se pide el otro camión que está cargado”. Bomberos tiene en la base “dos camiones de cuatro mil litros cada uno, que siempre están completos con agua. La única posibilidad de que Bomberos llegue con poca agua es que venga de otro incendio, algo que puede suceder. Pero cuando salimos de la base el camión siempre está con agua, porque el que recibe los camiones en el cambio de guardia controla que estén llenos, esa es la norma”.
El jefe local comentó que, si bien no fue el caso, puede suceder que “ahora en verano hay más incendios de campo, y puede ser que el camión esté trabajando apagando fuego de pastizal, y en ese caso se evalúa cuál es el caso más grave. En esos casos también se pueden alargar los tiempos de respuesta, porque el camión puede haber salido para la ruta, pero en ese caso se cita personal de franco para que quede de guardia por si pasa algo en la ciudad. En esos casos sí puede darse que el camión llegue con menos agua. Y el otro caso es que pueda tener algún problema para cargar el agua, con falla en la bomba o en el acoplamiento, pero no es lo usual ni es lo que pasó en este caso”.
Las llamas estaban generalizadas
Volviendo a la situación del fatídico incendio, dijo que “el camión salió de acá con el agua completa, llegó al lugar en 6 minutos y se destacaron dos puntos de ataque, uno por la ventana y otra con un bombero que ingresó al lugar. Se evalúa la situación porque se entiende que es desesperante para quienes están ahí, y quieren que el bombero haga algo. En este caso las llamas estaban generalizadas en la habitación, se estaba propagando para el almacén que tenía al frente de la casa. Tenía todo revestimiento de lambriz en las paredes y el techo, lo que ayudó a la rápida propagación, tomando también los postigones de madera que hubo gente que los arrancó y abrió todas las ventanas, lo que es un error. Se hace ya que molesta el humo, pero al permitir el ingreso de oxígeno el fuego se propaga más rápido. Si lo dejamos más hermético habrá problemas con el humo pero el fuego no se va a propagar bruscamente”. Agregó que “en tres minutos, en una casa de esas características, el fuego se generaliza muy rápido considerando el mobiliario, la ropa y el lambriz en paredes y techo”.
También está el hecho de que en ocasiones de emergencia, como pasa también con las ambulancias, “piensan que demora mucho, y de pronto son cinco o diez minutos y parece mucho más. Y hay que considerar el tránsito vehicular y peatonal, porque por llegar rápido a un lugar no se puede lastimar a otra persona. Siempre se trata de acortar los tiempos de respuesta”, afirmó.
En cuanto a que el camión se quedó sin agua, aclaró que “se trabajó por dos puntos de ataque, por la ventana donde había un fuego más violento, y otro punto de adentro por el pasillo para cortar la propagación hacia el frente de la vivienda. Eso llevó unos 15 o 20 minutos para apagar totalmente el fuego. El chofer me dijo que sobró agua, por lo que no tuvo que pedir el apoyo del otro camión que está cargado en la base. Y el protocolo indica que una vez que está controlado el fuego, que no afectará nada, se corta la maniobra y se va a recargar por las dudas que hubiera necesidad de una nueva intervención. Por lo tanto cortó la maniobra, fue a cargar y volvió a ver si había alguna brasa que pudiera volver a encender, pero no se volvió a encender. Cuando regresó ya estaba la policía científica y personal de Bomberos haciendo la pericia para determinar la causa”.
Hidrantes para recarga en la calle
Además de tener los dos camiones con tanques de cuatro mil litros, la ciudad tiene hidrantes en distintos puntos para los camiones de Bomberos, por lo que no necesariamente deben volver a la base a cargar. Si fuera necesario, uno de los camiones apaga el fuego y el otro camión le traspasa agua, “hace de abastecimiento y si es necesaria más, el camión de apoyo va a recargar, vuelve y otra vez le pasa al camión que está atacando el fuego. Pero nunca se corta el trabajo de apagar el fuego. Eso es lo que se hizo cuando el incendio en Hidráulica (en avenida República Argentina) y también una cisterna de OSE”.
Además, “tenemos la camioneta que tiene un tanque de 600 litros que utilizamos para fuegos menores, como en los contenedores o pastizales chicos, que también puede ser utilizado, por lo que en ese sentido, no habría problema de que falte el agua en momentos de extinguir un incendio.
Por otra parte, Fua dijo que en una vivienda de tamaño medio con mobiliario normal, se utilizan alrededor de 2.000 litros de agua para apagarlo, y los dos camiones que hay tienen 4.000 litros cada uno. Puso como ejemplo que los camiones de bomberos Iveco que se están montando en Alemania y que se venden en todo el mundo, vienen ahora con versiones de tanques para 2.000 litros de agua.
Rige el edicto del fuego
Fua recordó que “por el Decreto 436 desde el 1º de diciembre hasta la segunda quincena de abril está prohibido encender fuegos para hacer quemas, excepto cuando es con fines de cocción de alimentos (por ejemplo un asado en el parrillero) o para las propias maniobras de Bomberos, que se realizan la primera quincena de diciembre con prácticas para el personal zafral”, en el marco del llamado edicto del fuego.
Dijo que “en caso que un ciudadano vea una situación de ese tipo, que son de riesgo potencial, debe llamar al 911 o al 104 de Bomberos, tanto en la vía pública como en locales privados, porque está prohibido por el riesgo elevado de incendio”.
En cuanto a la situación de las forestales, recordó que “desde hace algunos años se están cubriendo por parte de privados, bomberos puede auxiliarlos en caso de algún problema, pero ya no estamos como antes con una brigada en Piedras Coloradas, aunque sí hay un destacamento en Guichón, que antes no había. Si hay problemas, nos llaman”.