La Organización del Fútbol del Interior deberá tomarse un tiempo para la reflexión: debe definir de qué lado se ubicará a la hora de tejer alianzas dentro del Congreso de la AUF.
Luego de haber peleado por cumplir con la exigencia de FIFA, el fútbol del Interior tendrá su cuota de poder dentro de la Asociación. Y teniendo en cuenta cómo se dividirá el Congreso –pero por sobre todas las cosas la enorme división que reina en el fútbol profesional– OFI puede ser clave. Y tendrá que definir de qué lado estará.
La ecuación es fácil. En el Congreso, cada uno de los 16 clubes de Primera División tendrá dos votos, es decir que suma un total de 32; la Segunda División contará con 14 votos; la Liga de Primera División Amateur contará con seis; OFI tendrá nueve; la Liga de Fútbol Sala, uno; la Liga de Fútbol Femenino, uno; los futbolistas, 11; los entrenadores, uno; y los árbitros, uno.
Por lo tanto, será necesario tejer alianzas y seguramente la primera llegará para la elección del presidente. Y OFI tendrá que evaluar con quién vota.
Hoy por hoy, hay dos frentes más que claros. Uno está integrado por los clubes más afines a Tenfield, que están dispuestos a que todo siga igual, con penurias económicas que ellos también sufren. Son aquellos que subsisten gracias a los adelantos de la empresa por concepto de los derechos de televisación, y que hace unos días intentaron que no comenzara la competencia.
El otro, es el grupo que asegura quiere cambiar la realidad de las últimas décadas del fútbol uruguayo. Y está liderada por los jugadores quienes, se dice, plantearán un frente común con árbitros y entrenadores, y también Nacional y Peñarol. OFI tendrá que evaluar, aunque el camino parece estar claro.
Los presididos por Mario Cheppi deberán elegir unirse a quienes pelearon por la inclusión de OFI en el estatuto de AUF, o a quienes hicieron todo lo posible para que no estuviera.
“No nos quieren nada”, dijo hace unos días un dirigente de OFI al término de la reunión convocada por AUF, haciendo referencia a los clubes.
Y es así. Más aun después de que OFI resultó determinante en aquella histórica votación que derivó en que se aceptara la propuesta de Nike para vestir a las selecciones, que llevó a que Tenfield y Puma tuvieran que poner muchísimo dinero más de lo que habían ofertado.
El tema es claro: OFI tendrá que definirse y acercarse a quienes entienden que se puede hacer del fútbol un mejor negocio para todos, o a quienes entendieron que 24 era menos que 5.
Aquella vez, sin beneficiarse en nada, OFI hizo que los clubes recibieran unos cuantos millones de dólares más. Y pese a ello las instituciones profesionales redoblaron su visión negativa con respecto al Interior.
Ahora, más que nunca, OFI deberá pensar qué camino toma. Porque esta vez sí forma parte de la Asociación. Y será su acción, que será vista y evaluada por todo el Interior, la que defina con claridad el pensamiento de quienes integran la organización. STB
