OFI, que peleó desde su fundación para ser reconocida por la AUF, quedó ayer en el ojo de la tormenta. Luego de que se decidiera en los últimos días el voto para Ignacio Alonso en las elecciones a presidente de la AUF, ayer 11 dirigentes decidieron por mayoría dar vuelta el voto y apoyar a Oscar Curutchet.
Para el mediodía de ayer estaba convocado todo el Ejecutivo. Se decidiría cuáles serían los nueve representantes en el Congreso de AUF, pero además se oficializaría el voto para Alonso.
Y eso no pasó. Tanto, que Cheppi pidió una votación secreta entre los presentes, para definir a quién se votaría. Y por 6 a 5 la decisión se volcó para Curutchet, desechando incluso el deseo de las Confederaciones.
Nadie entendía nada. Incluso se dejó la sede de OFI intentando mantener el secreto de la decisión de votar el bloque a Curutchet.
Pero la sorpresa llegó antes, cuando no todos los consejeros concurrieron a la reunión, la más importante en la historia de ese fútbol del Interior que reclamó históricamente ser parte de AUF; y que ahora definiría las elecciones. Como contrapartida, llegaron a votar algunas caras poco conocidas; actores secundarios, lo que llamó poderosamente la atención. OFI votó en bloque a Curutchet. ¿Por qué se cambió el voto? Se dice que por una oferta de contar con dos miembros en el Ejecutivo, y por 400 mil dólares anuales para proyectos de juveniles. Mientras, el país entero no entendía por qué OFI cambiaba de parecer con respecto al candidato a votar.
Luego de la primera vuelta, Nacional y Peñarol incluso ofrecieron al presidente de OFI, Mario Cheppi, formar parte de la Mesa Ejecutiva para votar a Alonso en bloque. Pero nada hizo cambiar de parecer al presidente, que dejó en libertad de acción a sus compañeros de delegación. Y cinco decidieron apoyar a Alonso, definiendo la elección y poniendo al menos un manto de decoro ante los rumores que rodeaban al fútbol del Interior, que primero tenía pensado votar a Carlos Ham, que luego bajó su candidatura, y posteriormente a Alonso.
El Interior deportivo se revolucionó. Los ojos se posaban sobre OFI, pero cuestionando abiertamente la postura adoptada, que seguramente (más allá del final) traerá aparejadas consecuencias a este Ejecutivo que lidera Cheppi.
Los rumores de que se convocará a un Congreso para pedir la renuncia de aquellos consejeros que faltaron a la reunión interna propiciando votos de actores de reparto, que cambiaron el rumbo decidido, fueron creciendo hasta la madrugada.
