Fuerte baja en el Indicador de Mercados retrajo fuertemente la demanda interna

No se han realizado negocios de lana, aguardandolos productores y empresarios del sector las novedades que lleguen desde el exterior.

La incertidumbre generada a nivel internacional con la fuerte baja en el Indicador de Mercados del Este, retrajo fuertemente tanto a la demanda, como a los productores, generando inactividad en el mercado interno de lanas.
De parte de los consignatarios, se entiende que habrá que esperar hasta que el mercado se calme. Actualmente la incertidumbre es mayor a nivel de los exportadores que de los propios productores, teniendo en cuenta la situación que atraviesan sus principales compradores.
Dentro de esta realidad, el informe de Faxlana sostiene que hay aún un importante volumen de lana sin comercializar aún, y que seguramente tendrá algunos días de cierta cautela y paciencia para que se arme nuevamente una corriente de negocios con valores más cercanos a las expectativas de los productores, las cuales hoy en día se volvieron a distanciar fuertemente.
José Luis Trifoglio, jefe del departamento de Lanas de Zambrano y Cía., precisó que “es una zafra muy atípica y que no deja de sorprendernos en los distintos meses con las distintas noticias” que de alguna manera inciden positiva o negativamente en el mercado.
El consignatario señaló a Faxlana que en un principio “fue la guerra comercial entre China y Estados Unidos, después fue el coronavirus, después el ataque cibernético, a lo que es el sistema de venta de Australia que puso nerviosos a muchos compradores y también a muchos productores australianos. Ni que hablar de la sequía y las consecuencias en la calidad, luego los incendios, realmente una zafra muy atípica que viene muy lenta, no solamente para Uruguay sino que para todo el mundo lanero”.
El presidente de la gremial de consignatarios laneros dijo que “analizando todos esos motivos que influyeron a lo largo de los meses en el mercado lanero”, el lado positivo es que “la caída de los precios podría haber sido mucho peor”. Trifoglio recordó que las “empresas chinas estuvieron cerradas durante más de un mes, de alguna manera llevando a no permitir el ingreso de su personal a las fábricas” por el tema del coronavirus, lo que “provocó que en el período de mayores ventas al por menor, que es en el festejo del nuevo año lunar chino, de alguna manera la gente no saliera a la calle y las ventas al por menor cayeron estrepitosamente”.
Más allá de que el mercado continúa “oscilando de acuerdo a las diferentes circunstancias que lo van afectando” para el consignatario los precios podrían haber registrado una mayor pérdida. “La apreciación de la moneda norteamericana frente a otras divisas también influyó sobre los precios de la lana” principalmente para nosotros que comercializamos nuestras lanas en dicha moneda.
Para Trifoglio en nuestro país, así como en otros más allá de Australia, “en estos momentos tienen lanas de muy buena calidad, superiores incluso a lanas que son producidas en algunas zonas de Australia”. A pesar de que la calidad hoy pesa fuertemente en las operativas del mercado lanero australiano y al tener mejor calidad deberíamos, en términos relativos, tener mejor valores, el consignatario dijo que “lamentablemente somos un país tomador de precios”. Al mismo tiempo resaltó que existen compradores a nivel mundial que “han descubierto la calidad de lanas que tenemos y también han enfocado sus requerimientos de lana hacia nuestro país”.