Nada nuevo bajo el sol, al menor por el momento. Y todo hace indicar, a medida que transcurren los días y las declaraciones, que más allá de intenciones de protocolos y demás, los deportes colectivos serán los que más demoren en volver. Y el fútbol, lógicamente, está entre ellos.
Mientras tanto, en la Liga de Fútbol se barajan posibilidades en cuanto a la posible forma de disputa una vez que vuelva la actividad, pero también se piensa en lo económico.
Por lo pronto, mañana los clubes deberán pagar la cuota mensual que, en tiempo de pandemia de coronavirus, en este caso de $ 1.150 correspondiente a los gastos del mes de abril, durante el que la Liga permaneció cerrada. Normalmente, la cuota es de $ 5.660 y ya el mes pasado fue sensiblemente menor. Ahora, el costo se redujo dado que las instalaciones de la Liga estuvieron cerradas.
Pero por otra parte, se planteó a los árbitros que habrá que estudiar una baja en los aranceles acordados, en virtud de la situación económica, cuando la pelota vuelva a rodar.
En ese aspecto, hubo una reunión entre dirigentes de la Liga y representantes de los árbitros, en la que se puso el tema sobre la mesa.
“Charlamos con los árbitros y la semana que viene podríamos tener alguna respuesta. Fecha de comienzo de la actividad no hay, es una locura ponerse una fecha, y cuando se confirme se barajarán posibilidades de forma de disputa. ¿Entrenamientos? Si vuelven a entrenar, es claro que la responsabilidad no es nuestra”, dijo el vicepresidente de la Liga, Juan Elliot.
En tanto, los árbitros recibieron la inquietud y, justo es decir, también ellos se imaginaron esta posibilidad hace ya unas cuantas semanas, al ser consultados por EL TELEGRAFO. En este caso Matías Scnheider, presidente de la Asociación de Árbitros, dejó en claro que la respuesta será la que los socios definan en venideras reuniones.
Schneider indicó que “nos llamaron para comenzar a rever los aranceles, y también bajar el número de guardias de seguridad”, con el objetivo de poder ahorrar en costos de los espectáculos. Pero por el momento dejó constancia de que “no resolvimos nada, porque primero tenemos que juntarnos con la comisión directiva, luego con la Corporación de Árbitros, y posteriormente hablar con los socios, porque en definitiva serán ellos los que resolverán qué postura tomar. El tema no es tan fácil de definir”.
Esto no quiere decir que la respuesta será negativa, ni mucho menos. “Todos queremos comenzar a jugar, pero hay que conversar. La realidad es que no hay fecha prevista para la vuelta, pero esperamos nosotros reunirnos esta semana que entra”, dijo el presidente de la Asociación de Árbitros.
Schneider, además, dijo que si bien “solo fuimos a escuchar” a la reunión con los dirigentes de la Liga de Fútbol, “el tema pasa por trabajar entre todos y solucionar los problemas entre todos”, dejando la puerta abierta a la negociación para bajar los aranceles estipulados.
Mientras tanto las pelotas siguen en los vestuarios, a la espera de que pueda definirse el comienzo de la competencia, que todavía deberá esperar si, como dicen las autoridades del deporte nacional, los deportes colectivos serán los últimos en volver.
