“En Paysandú creo que Nicolás Olivera será el gran transformador”

“Hay que tomar las elecciones departamentales como una segunda elección. Con eso en mente, si el Partido Nacional y la coalición hubiera en estos meses manejado mal la pandemia, se marcaría negativamente. Pero, por el contrario, la realidad indica que el Partido Nacional en particular va a mantener todas las intendencias que tiene y recuperar otras que hoy están en manos del Frente Amplio. Claramente se ve así, y me refiero especialmente a los departamentos del litoral, entre ellos Paysandú”.
El senador Jorge Gandini, durante su visita a Paysandú de las últimas horas, aseguró que “en lo que refiere a los departamentos, el Partido Nacional crecerá. No tengo dudas”.
Como integrante del Movimiento Nacional Por la Patria, llegó para trasladar “el apoyo en este departamento a la candidatura de Nicolás Olivera y el apoyo a la lista 230 de Alejandro Colacce (a la Junta Departamental). Creo que son los mejores para recuperar y transformar al departamento. Tendrán todo nuestro apoyo desde el Parlamento”.
“Ya hubo a nivel nacional un voto de cambio muy claro que cerró un ciclo del Frente Amplio, en esas dos vueltas que tiene como particularidad la elección nacional. En la segunda se instaló una coalición a partir de un programa de gobierno conjunto que es el que convenció a la ciudadanía. Creo que ahora, en setiembre, en aquellos departamentos gobernados por el Frente Amplio se genera también la necesidad de cambio. Un cambio para progresar. En Paysandú creo que Nicolás Olivera será el gran transformador”, destacó Gandini.

PRESUPUESTO MUY COMPLEJO

En plena consideración del Presupuesto Nacional, el experimentado legislador del Partido Nacional recordó el de 1985 como “el año en que nos fue muy difícil acordar un presupuesto donde no solo estaba lo económico, sino que también había que rearmar el estado democrático. Fue muy complejo”.
Pero este “va a ser muy complejo también porque hay que reasignar recursos definiendo cuáles son las prioridades. Tenemos que ser cuidadosos en distribuir adecuadamente lo que hay, que es poco. Porque dejaron las cajas vacías, con el déficit fiscal más elevado de los últimos 30 años, con una economía en recesión”.
“Con una inflación que superó el rango meta, con un desempleo del 10,5% cuando tomamos el gobierno, la llegada de la pandemia complicó más la situación. No hay de dónde sacar y en estos momentos difíciles lo que importa es tomar buenas decisiones”.
“Lo que hay que priorizar son las rutas de salida, entre las que deben promoverse la generación de empleo. La construcción es un buen ejemplo. Porque tras su retorno de la pandemia hoy tiene más trabajadores que en 2019. Entonces, promover al sector privado para que vuelva a invertir, para que genere el crecimiento de la economía es esencial. Porque a su vez generará una mejor política social y trabajo”.
“Hay que ser austeros, tomar buenas decisiones para 2021, comprendiendo que a partir de 2022 comenzará el esperado efecto salida de estas condiciones complejas”.
Un sector al que no se le restringirá recursos es el de la investigación, la ciencia y la tecnología, en parte ante la notable respuesta científica ante la COVID-19. “Estamos apoyando mucho al sector científico –dijo Gandini– como mirada al futuro. No hay que olvidar que es un compromiso antiguo destinar el 1% del Presupuesto al sector pero le dedicamos el 0,4%. Estamos a 300 millones de dólares del compromiso. No vamos a llegar, pero vamos a mejorar ese porcentaje”.
“HAY QUE SER MÁS SERIO AL GESTIONAR INVERSIONES”
La decisión favorable a Uruguay en la Corte Internacional de Arbitraje de La Haya, que desestimó la pretensión de la minera india Aratirí que pedía 3.500 millones de dólares como compensación por un negocio no concretado, y además condenó a la compañía a pagar 4 millones de dólares por costas legales, “es un resultado definitivo”, aseguró Gandini.
“Además hay que decir que llevaron el caso a La Haya porque no lo pudieron llevar a otras jurisdicciones en la medida que varios de los propietarios de la empresa están embargados en varios países. No encontraron dónde más presentarlo”, dijo.
“Fue una empresa que vino bajo el amparo de operadores políticos del Frente Amplio. Llegó vendiendo ilusiones, espejitos de colores. Mujica vendió mucho humo también. Aseguró que íbamos a tener una de las mayores explotaciones de hierro, que íbamos a transportar por un caño el hierro hacia un puerto de aguas profundas. Nos quedamos sin el caño, sin el hierro y sin el puerto de aguas profundas. Nada de eso se pudo concretar”.
“La minera recibió la promesa de beneficios más grandes que los de UPM, pero se fue cuando cayó el precio del hierro. Cayó el negocio e iniciaron un juicio por 3.500 millones de dólares. Creo que debe servir como lección. Hay que ser mucho más serio al gestionar inversiones; más cuidadosos para elegir el buque insignia de las inversiones”.