Los extrabajadores del grupo económico Tecnogrup aguardan la marcha de las demandas judiciales entabladas contra Lafemir S.A. y el proceso de adquisición de sus acciones por parte de una compañía estadounidense, en el marco de las gestiones que lleva adelante la Liga de Defensa Comercial (Lideco) como síndico encargado de su liquidación.
“El proceso de esta empresa que se manejaba en torno al proyecto de energía fotovoltaica y que era Tecnogrup, brindaba prestaciones a otras 14 empresas encargadas de distintos rubros. En un momento se pensó en instalar una plataforma de paneles solares para la región e implicaba mayor inversión y la disponibilidad de mano de obra”, relató el dirigente del sindicato metalúrgico (Untmra), Manuel López.
Posteriormente, el alcance del proyecto “comenzó a disminuir a raíz de incumplimientos en las inversiones, incluso con UTE. La empresa nunca asumió que había atrasos e incumplimientos de requisitos exigidos por el Ministerio de Industria y que incluso eran exigidos para cualquier otra empresa”, señaló.
López precisó que la empresa “terminó cerrando y hubo una ocupación por parte de los últimos trabajadores encargados del armado de los paneles. Se cobró parte de un dinero correspondiente a la inversión de paneles y tejido inalámbrico, pero hay incumplimiento de pago de salarios a 300 trabajadores, quienes antes del cierre ya cobraban con 3 o 4 meses de atraso. Es decir, nunca se cobraba un sueldo completo y cuando se cobró algo fue por negociación y conflictos”, en el marco de una situación que ya lleva dos años.
La mayoría de los trabajadores “pasó por el Ministerio de Trabajo para intentar cobrar y están con diferentes abogados en negociaciones con el síndico, para ver las posibilidades concretas de pago. En febrero del año pasado, entablamos un nuevo juicio con la última tanda de trabajadores y ahora veremos, porque para nosotros es mucho tiempo. Y tampoco sabemos lo que puede llevar”.
Sin embargo, reconoció “la voluntad del síndico para ver la posibilidad de cubrir adeudos. Porque, por ejemplo, a la mayoría de los trabajadores de la segunda tanda, las deudas oscilaban entre 350.000 y 950.000 pesos”.
Consultado sobre el mantenimiento de los paneles ya instalados, explicó que “una empresa tercerizada integrada por trabajadores españoles, se encarga de esta tarea”.
