Incendio en casa de barrio Los Ceibos dejó sin hogar a un jubilado con problemas de salud

Un incendio cuyo origen será investigado por Bomberos dejó sin hogar a un señor mayor que sufrió una descompensación y debió ser internado. Las llamas, que no se descarta hayan sido producto de un cortocircuito, arrasaron con todas las pertenencias y la edificación en que vivía don Luis “Pitín” Ruíz, en el barrio Los Ceibos de Calle 31 y Roldán vieja.
Próximo a las 14 de la víspera, se informó a la Policía de un incendio en la zona de Azucitrus, por lo que de inmediato se dirigieron para constatar la situación. Mientras eso pasaba, los vecinos se movilizaron para sofocar las llamas y evitar mayores pérdidas, sobre todo teniendo en cuenta que las casas son contiguas.
“Yo venía volviendo de la casa de mi hermana cuando lo vi al vecino (Pitín) recostado al muro de la casa de al lado. Me llamó la atención porque si bien es mayor, no tiene dificultades para caminar. Cuando me acerqué veo que de la casa de él, la número 39, salía humo por todos lados. Ahí me di cuenta que él estaba como en shock”, relató a EL TELEGRAFO uno de sus vecinos. “Enseguida corrieron otros vecinos y lo que hicimos fue romper el caño del agua como para que saliera con presión y otros vecinos tiraron unas mangas. Empezamos a apagar el fuego desde afuera porque entrar era imposible”, comentó.
Afectado por la situación, “Pitín” se lamentaba por la casa. “Nos partió el alma porque gritaba ‘¡la casa de mamita, mamita me va a matar!’…”. Su madre, a quien hacía referencia, falleció hace unos meses y era con quien compartía el hogar.
“Cuando llegaron los bomberos, se encargaron ellos de seguir apagando el fuego y después hacer la inspección. No estaba muy claro si el fuego empezó en la cocina, o si él estaba cocinando y pasó algo, o si fue un cortocircuito porque había unos cables chamuscados, que podría ser eso”, dijo el vecino.

NO TIENE DÓNDE VIVIR

Al lugar acudió una ambulancia que atendió al señor, que sufrió una descompensación y no reaccionaba. “Lo trasladaron porque había inhalado un poco de monóxido de carbono y además el tiene un bypass cardíaco. Pero lo de él fue más por la situación”, comentó su vecino.
Como el barrio está compuesto por casas pertenecientes al Sistema Integrado de Acceso a la Vivienda (SIAV), que son propiedad del Banco de Previsión Social, se le dio aviso a la entidad de lo ocurrido. Esto trajo una serie de complicaciones que los vecinos quieren solucionar a favor de “Pitín”.
“En realidad la beneficiaria de la casa era su mamá. Entonces al fallecer, se había informado que Pitín no podía vivir más ahí. Enseguida él, que también es jubilado, hizo los trámites para que le presten la casa, pero como todo papelerío demora, nunca le dieron respuesta. Por lo menos hasta ahora. Nosotros como vecinos hablamos hoy (por ayer) para que le den una rápida solución porque va a salir de estar internado y no va a tener dónde vivir”, dijo el vecino.
Un matrimonio de adultos mayores que viven en la casa lindera a la del incendio fue mudado hacia otra finca del mismo barrio. “Un grupo de vecinos los ayudamos a que se mudaran, porque el problema es que la pared afectada puede derrumbarse. Entonces del BPS nos dijeron que van a mandar a arreglar, porque siempre están viniendo a pintar y hacer mantenimientos. Mientras tanto, ellos estarán en otra casa”, contó. Ayer les llevaron parte del juego de dormitorio y hoy continuarán ayudándolos a instalarse. “Nos queda ahora saber qué pasará con Pitín, porque perdió todo. Lo único que quedó medio para rescatar es un mueble con juegos de té y otras piezas de cerámica que eran de su mamá. Que también pensamos que más allá del uso, va a ser lo único afectivo, por así decirlo, con lo que se va a poder quedar”, mencionó.
Quienes deseen colaborar, pueden acercar donaciones a las casas 13, 14 y 42 del barrio o comunicarse al celular 098550323.