No suspenden clases en el Liceo 1; en Paysandú hay 20 casos de tuberculosis

La inspectora regional de Secundaria, Carmen Canosa,y la directora del Liceo 1, Stella Volpe.

Fue descartado el cierre temporal del Liceo 1, donde aparecieron dos casos de tuberculosis, porque “no es una medida pertinente; son solamente dos personas enfermas –ya están bajo tratamiento y no concurren al liceo–, por lo que es improbable que surjan más casos, después de realizarles los análisis correspondientes a los compañeros de la alumna y a parte de los profesores”, como indicaron a EL TELEGRAFO la inspectora regional de Enseñanza Secundaria Carmen Canosa y la directora del liceo, Stella Volpe.
Por otra parte “no es necesariamente vinculante que hayan adquirido la enfermedad en nuestras aulas. Pudieron contagiarse en otro lado”. La alumna presentó signos compatibles con neumonía, decaimiento y dolor de espalda, pero durante las vacaciones de julio. Posteriormente no se reintegró al liceo. “El caso de la docente fue un hallazgo porque como prevención se determinó realizar exámenes a todos los que posiblemente estuvieron antes de las vacaciones con la joven estudiante. Tampoco es posible determinar si el contagio fue en el liceo”, agregaron. La estudiante se encuentra internada y en tratamiento médico, siendo tratada con los medicamentos específicos, en tanto la profesora está en su casa, desde que los médicos determinaron que podía ser tratada sin internación.
Canosa y Volpe aseguraron que “la circunstancia de ser un centro de enseñanza ha transformado el caso en noticia. Estamos en un momento de emergencia sanitaria, por lo que cumplimos el protocolo por la COVID-19, siguiendo las directivas de la ANEP y del Ministerio de Salud Pública. Las autoridades de la enseñanza somos primero garantes de la salud, pero la sociedad es tan compleja que lo sanitario va de la mano de lo educativo. Por lo tanto tenemos estudiantes y docentes que serán portadores de diversas enfermedades. Casualmente ahora tenemos una estudiante y una docente portadoras de una enfermedad contagiosa”.
“No es una pandemia de tuberculosis, son dos casos aislados, pero no tenemos evidencias para comprobar que los contagios fueron dentro del liceo”, resaltaron.
Aunque no se procederá al cierre temporal, sí “aprovecharemos este fin de semana para realizar lo que periódicamente se hace, una limpieza profunda”. Así mañana sábado el Departamento de Servicios llevará adelante una desinfección con hipoclorito, no solo en el Liceo 1 sino también en UTU y en Paysandú Innova, desde que la profesora da clases también en esos dos lugares. Gastón Giles, director general de Servicios, confirmó el trabajo que llevará adelante la Intendencia. El lunes 24 en el Liceo 1 “se realizará una limpieza profunda, una medida preventiva más y el miércoles volveremos a dictar clases como lo estamos haciendo ahora, en el marco de la emergencia sanitaria por COVID-19”.

“SEIS HORAS EN SITUACIÓN DE CERCANÍA”

Carlos Leoni, director departamental de Salud, indicó a EL TELEGRAFO que “siempre hay casos de tuberculosis, más allá que la mayoría de la población tiene la vacuna BCG; ocurre que a veces las defensas corporales bajan y entonces ahí es posible la aparición de alguna enfermedad. Son solamente dos casos que tienen como elemento común que ambas personas concurren al Liceo 1, pero eso no permite indicar fehacientemente que haya sido mutuo contagio”.
“Atento a que profesores concurrieron a la Dirección Departamental de Salud en busca de asesoramiento, y los vimos preocupados, decidimos que vamos a realizar charlas para profesores por un lado y alumnos por otro, para que conozcan detalles de la enfermedad y cómo puede transmitirse. Asimismo brindar tranquilidad a toda la población que no se trata de un brote de tuberculosis”, dijo. “Una de las cosas que debe conocerse es que para que exista contagio quien es portador debe estar al menos seis horas con otra u otras personas, en situación de cercanía para la transmisión del bacilo de Koch, una microbacteria. No es similar al coronavirus y en los casos aparecidos en el Liceo 1 la carga bacterial es muy baja. Tiene su impacto público por el lugar donde aparecieron las portadoras, pero que toda la comunidad educativa quede tranquila”, subrayó.

“EN PAYSANDÚ HAY 20 CASOS”

El doctor Ignacio Richiero, coordinador de la Comisión Honoraria Departamental de Lucha contra la Tuberculosis coincidió con Leoni en que “las personas deben estar junto a una enferma durante horas, más de seis, aun cuando en el caso de centros educativos tomamos cuatro horas. Se transmite vía aérea, debe ser inhalada cuando la persona portadora estornuda, habla e incluso canta”.
“Son dos de los casos que actualmente hay en Paysandú, donde el total es de unos 20 pacientes. Se dio en un liceo, cuando años antes aparecía en escuelas. Pero hay casos en cualquier escenario, no tienen nada que ver los centros de enseñanza”, agregó.
“Lo que se hizo es lo usual, investigar al entorno. Por ejemplo hay veces en que se analiza a la familia con la que vive y sus compañeros de trabajo. En este caso a otros alumnos y a profesores”, dijo luego. Desde que la BCG es una de las vacunas que integran el Programa Nacional de Vacunas de Uruguay, “podemos estar en contacto con la bacteria de la tuberculosis, pero el cuerpo la combate porque tiene defensas. Un porcentaje mejor de la población tiene las defensas bajas por múltiples razones, entre ellas inmuno deficiencia, diabetes, alcoholismo, drogadicción, trasplantados y puede padecerla. Por supuesto, estoy hablando de modo general, no puedo referirme a estos casos puntuales porque sería violar los derechos de los pacientes”.
Finalmente informó que cuando una persona “tiene síntomas compatibles con tuberculosis, como catarro, adelgazamiento drástico o una neumonia no bien resuelta, puede concurrir al Centro de Lucha Antituberculosa para que se le realice una baciloscopía y también –en caso de ser necesario– una radiografía”.