“Donde sea posible haremos que nuestros funcionarios se acojan a tareas de teletrabajo, pero somos conscientes que no siempre se puede, por razones de mejor servicio o por la necesidad de respuesta a los contribuyentes”, dijo el intendente Nicolás Olivera a EL TELEGRAFO.
“Pero tomamos la decisión de ser muy firmes en el acceso a las reparticiones de la Intendencia, en el sentido que nadie podrá hacerlo sin tapabocas. Al mismo tiempo, desaconsejamos la concurrencia si hay otra vía para solucionar la atención, por ejemplo a través de consulta telefónica. Asimismo, recordamos que la agenda web está vigente y eso permite reducir sustancialmente la presencia de público. Todos estos elementos contribuirán a la mejor atención, haciendo nuestras las recomendaciones del Poder Ejecutivo en las últimas horas”, agregó.
En la mañana de ayer se reunió el Comité Departamental de Emergencias, que al final del encuentro emitió una declaración en la que establece que en el departamento de Paysandú “no se autorizarán las actividades que incentiven la aglomeración de personas, sobre todo aquellas que impliquen el flujo de habitantes de distintas localidades y departamentos y que sean desarrolladas en lugares donde no se pueda medir el aforo correspondiente”.
Tampoco se autorizan hasta nuevo anuncio “las actividades deportivas que se realizan en espacios cerrados, tales como gimnasios, fútbol 5, clases de baile, academias y similares”.
En el caso de las autorizaciones ya otorgadas “estarán sujetas a continua revisión por parte del Comité Departamental de Emergencias atendiendo a la evolución de la situación epidemiológica nacional y departamental”.
En estos días el cuerpo inspectivo municipal recorrerá restaurantes, pubs y similares para una “etapa de difundir” las nuevas medidas del Poder Ejecutivo que exigen el cierre a medianoche. Posteriormente se impondrá un “plan de control a llevarse adelante por los inspectores y la policía a partir de la hora 0 de cada jornada”.
También se apela “al compromiso de la población, a los efectos de ser muy cautelosos en cuanto a la organización de fiestas familiares en domicilios particulares” y “se continuarán realizando las fiscalizaciones que se vienen llevando a cabo y aplicando las sanciones correspondientes”.
En los espacios públicos se encomendará a “facilitadores debidamente identificados” a realizar campaña haciendo énfasis en el distanciamiento físico y uso de tapabocas.
