Jorge Canziani: “Ha sido un gran avance”

En la zona del primer piso del nuevo edificio de Comepa, se ubicará el servicio de gastroenterología con sus estudios de endoscopía. Como le sucede al resto de las prestaciones que se han mudado a la ampliación de la mutualista sanducera, goza de mayores comodidades tanto para el personal como para los pacientes.
El coordinador de gastroenterología de Comepa, el Dr. Jorge Canziani, no dudó: “Ha sido un gran avance, un paso adelante. Estamos contentos. Ha sido una forma además de brindarle a la gente un poco más de comodidad. Y de devolverle algo más al público. Esto es dinero de los afiliados. Si le podés evitar que se suban a un auto u ómnibus para que se vayan a atender a Montevideo, bienvenido sea. Espero que esta sea una etapa buena para todos”, auguró.
“Desde setiembre de 2010 hacemos endoscopia digestiva; empezó a funcionar en el área del servicio de urgencias, en la esquina del sanatorio, el viejo block del Modelo, en esa esquina redondeada (en Monte Caseros y Colón). Ahí se realizaban los estudios endoscópicos digestivos, donde disponíamos de sala, lavadero, baño”, comenzó a describir Canziani.
“De entrada estuvo bueno pero luego empezó a quedar chico. Con cada vez más trabajo, los pacientes que venían a hacerse esos exámenes esperaban compartiendo la sala de espera de urgencias, si bien se anuncia en ventanilla a qué se iba. Hoy eso ya no sucede, el paciente viene, entra y a la salida habla con sus familiares”, continuó. En la planta nueva, en cuyo piso compartirán espacio con el sector de estudios cardiológicos o la urodinamia, cuenta con una sala de espera adelante con una recepción, que da hacia la calle Vizconde de Mauá, y –lo más interesante– tendrán dos propias salas de endoscopía.
Canziani destacó que todo este edificio “está conectado hacia el sanatorio”. En todas las plantas. “Nosotros, por ejemplo, nos conectamos al fondo con el primer piso del sanatorio: hacia la izquierda está el CTI y a la derecha el block quirúrgico. Si el paciente está internado, baja por los ascensores del sanatorio e ingresa directo, y no entra en contacto con la gente que está esperando. Como sucedía antes en el servicio de urgencias, que el paciente que acudía de sala atravesaba todo ese servicio para llegar a la endoscopía”.
Claro está, en ese sentido, todos se sentirán “más cómodos”, como reconoce Canziani. Además de las dos salas de endoscopía, se tendrá una sala propia de recuperación. “Cada día se hacen más exámenes con el paciente sedado, anestesiado, entonces al salir de la sala encuentra que al medio, entre las dos, hay un área en el que el paciente queda monitorizado. En general salen despiertos, pero otros quedan un poco más dormidos. O le cuesta un poco reenganchar”, ahondó el médico gastroenterólogo quien ha estado al frente del servicio desde hace siete años.
Canziani reflexionó respecto a que la medicina “ha evolucionado en la historia”, y que este paso de Comepa va en la dirección correcta. “Hoy las exigencias son otras, en beneficio de los pacientes. Y este nuevo edificio se adecúa a estas exigencias. Tenemos un local de trabajo de primer nivel. Nuestros equipos también son de primera”, se congratuló.
“Hoy Comepa está adquiriendo un nuevo duodenoscopio. Esto son estudios que requieren mucha práctica y un gran entrenamiento previo. Estas cosas se han ido encauzando por muy buen camino, y siempre aprendiendo sobre la marcha. Pensás que estás bien pero luego ves algo y te preguntás si lo tenés o lo aplicás”.