El senador oficialista Jorge Gandini dijo a EL TELEGRAFO que una posibilidad de respuesta efectiva para los reclamos de los transportistas internacionales, que entienden que son afectados por la competencia desleal de camioneros argentinos es que se utilice el pago por instrumentos electrónicos bancarizados, como tarjetas y transferencias, para que los transportistas del vecino país no hagan la “jugada” de cobrar dólares en papel y cambiarlos en el mercado paralelo de su país, aumentando significativamente el equivalente en pesos argentinos.
Señaló que “los transportistas de carga se quejan con razón de que los camioneros argentinos llegan aquí y cobran más barato los viajes. Cobran en dólares en efectivo en la culata del camión y luego lo cambian en el paralelo en la Argentina, y sacan tres veces lo que cobraron. Por lo tanto pueden rebajar el precio final, porque hacen mucho más dinero en la Argentina de esta forma y ello deja fuera de competencia al transporte uruguayo”.
“Es otro efecto negativo producto de esta diferencia de cambio. En la medida que cobran en dólares acá y allá lo pasan a pesos argentinos en un cambio paralelo, pueden darse el lujo de bajar el precio final, y eso compite deslealmente con el transporte uruguayo”, explicó.
Sobre la posibilidad de llevar adelante medidas para hacer frente a esta situación indicó que “una de las posibilidades es exigir el pago electrónico, es decir que los fletes se paguen todos con instrumentos electrónicos y no con plata viva, porque de esta forma al instrumento electrónico no podrá luego cambiarlo en el mercado paralelo como los dólares en papel”.
“Es decir, se debería pagar con una transferencia, con tarjeta, con sistema bancarizado, para que no se pueda utilizar el tipo de cambio como una variable del precio final. Este fue un tema que nos han dejado planteados los transportistas y nosotros lo vimos con buenos ojos en el Parlamento, pero obviamente es una medida que debe tomar el Ejecutivo si lo asume como viable”, puntualizó Gandini.
Precios de frontera
Acerca de la situación en general en el litoral, pero sobre todo en Salto y Paysandú, el senador nacionalista dijo que el tema sigue en carpeta y en estudio en el Parlamento, pero que las alternativas son muy relativas ante la abismal diferencia de precios.
Expresó que “seguimos trabajando y en la Comisión de Hacienda del Senado tenemos radicados dos proyectos que tienen que ver con los precios de frontera, uno del senador Sergio Botana y otro de senadores de Cabildo Abierto. Pero siguen allí, todavía no se le ha podido encontrar una vuelta de solución, porque es muy complejo todo este tema de las microimportaciones y el punto es además hacerlo viable, hacerlo práctico, para sacarlo solo del sentido común y ponerlo en la realidad”.
“Lo realmente complicado es bajarlo a tierra, precisamente, para que lo que se gana por un lado no se pierda por otro y se entre en una complejidad negativa para lo que se busca, porque a veces lo que se pretende resulta de muy difícil aplicación en la práctica, y requiere además de un esquema de controles que tiene su complejidad para evitar distorsiones y que se desvirtúe”, significó.
“Pero seguimos trabajando, aunque lo que está pasando en Argentina parece que ya está dejando de ser coyuntural para extenderse y eso va a proyectarse negativamente en la región, además de afectar nuevamente la temporada turística. Con la diferencia de cambio que tenemos, los que vengan en verano no van a tener el poder de compra que teñían siempre”, advirtió el legislador.
